Yoán Moncada otra vez está en problemas. Y no es por bajo rendimiento, no es por falta de compromiso. Es por lo mismo de siempre: las lesiones.
Los Angelinos de Los Ángeles apostaron por el cubano para reforzar su infield, pero apenas a días del inicio de la temporada, ya hay dudas sobre si podrá estar listo para el 27 de marzo. Un golpe profundo en el pulgar derecho lo ha dejado fuera de acción, y aunque no hay fractura, la incertidumbre es total.
Ron Washington, el veterano manager del equipo, lo dejó claro: «Parece que estará fuera por un tiempo. No hay nada roto, pero hay que esperar a que sane antes de que pueda volver a batear».
Moncada, de 29 años, fue removido del lineup el viernes a última hora. Según Washington, ni el propio jugador sabe cómo ocurrió la lesión. «Un día simplemente llegó y el médico dijo que tenía el pulgar lastimado. Pudo haber sido algo que sucedió y no sintió hasta el día siguiente. Pero es una contusión profunda, no puede lanzar y tiene problemas al batear».
Yoan Moncada y su historial de lesiones
Para Moncada, es otro golpe en una carrera que ha estado plagada de visitas a la lista de lesionados. Apenas jugó 12 partidos en 2023 con los Medias Blancas de Chicago por una distensión en el aductor izquierdo. Cuando finalmente regresó en septiembre, el equipo decidió no utilizarlo en los últimos días de la temporada. En los últimos tres años, solo ha disputado 208 encuentros.
Los Medias Blancas no vieron justificación para pagarle los 25 millones de su opción y lo dejaron en libertad. Los Angelinos, necesitados de profundidad en el infield, lo firmaron por cinco millones, esperando que un cambio de escenario lo ayudara a recuperar su nivel. Pero antes de que su temporada empiece, ya está en duda.
Su ausencia cambia los planes de los Angelinos. Luis Rengifo, quien también venía lidiando con molestias físicas, ahora se perfila como el principal tercera base. Con esto, Tim Anderson, otro jugador en busca de reivindicación, aparece como el favorito para adueñarse de la segunda base.
Anderson, de 31 años, tampoco la ha pasado bien en los últimos tiempos. Viene de una temporada difícil con los Marlins, donde su producción cayó en picada y su situación personal lo afectó dentro del terreno. Esta primavera batea para .243 (9 de 37), con una leve mejoría tras un inicio flojo. Washington cree que aún tiene gasolina en el tanque. «Cada día que compite está mejorando. Su talento sigue ahí, solo tenemos que ser pacientes».
Mientras tanto, los Angelinos siguen acumulando incertidumbre. Además de Moncada, también esperan por la recuperación del cubano-americano Zach Neto, quien aún se rehabilita de una cirugía en el hombro derecho y apunta a regresar en abril.
El tiempo sigue corriendo y el Día Inaugural está a la vuelta de la esquina. Para Moncada, la gran pregunta no ha cambiado: ¿podrá finalmente mantenerse en el terreno o las lesiones seguirán marcando su carrera? Por ahora, la historia parece la misma de siempre.