PINAR DEL RÍO, CUBA– Bajo amenaza de lluvia comenzó la revancha para el conjunto matancero en la semifinal de la Serie Nacional de Béisbol número 59. Los nervios se apoderaron de Ferrer quien explotó con el principal Osvaldo de Paula y terminó fuera de juego por expulsión.
En el cuarto episodio el receptor que milita en el béisbol japonés, Ariel Martínez, no pudo retener un rompimiento del astro Fredy Asiel Álvarez y entró la primera del juego para los locales, la enrevesada jugada vio la protesta del mentor yumurino y el replay dio la razón al principal.
Otra vez el receptor de los cocodrilos mostró manos de mantequilla e hizo malabares con la blanca después de otro rompimiento de Fredy exaltando los nervios matanceros. Luego una jugada de sacrificio de Eduardo Blanco se convirtió en out por regla debido a que el corredor anduvo la ruta por dentro de las líneas interfiriendo en el tiro del inicialiata Rafael Viñales.
De Paula decretó el out y la furia del veterano mentor en el reclamo no se hizo esperar. El juego continuó y un hit del indomable César Prieto y boleto a Raico Santos sirvieron la mesa para Yurisbel Gracial. Yudier Rodríguez dejó entonces la lomita para Wilson Paredes que no pudo evitar el sencillo de Gracial para retomar la ventaja, ni la derrota de Yudier.
La ventaja se amplió en el de la suerte con elevado de Javier Camero impulsando a César. La ventaja pudo ser más grande pero el receptor tunero se hizo grande y atrapó tres pelotas salvajes de Yoalkis Cruz que parecían tener destino a los colchones.
Yamichel Pérez parecía no entender la importancia del choque. En un estadio donde la falta de público y en el que lanzar agua al terreno se tornó diversión, el zurdo espirituano ponía la bola donde quería y terminó sin sobresaltos tres completas permitiendo un solo imparable y salvando la victoria de Fredy.
La pírrica ofensiva de los campeones le impidió hacer más por la victoria contrastando con los once corredores quedados en base por sus rivales que conectaron diez indiscutibles, tres a la cuenta de Prieto convertido en una pesadilla en tierras del balcón del oriente.
El 4-2 favorable a los matanceros no se movió y las hostilidades se tornaron en empate a un juego por bando. El pareo se marcha a tierras del Yumurí para definir quien discutirá la final. Entonces se sabrá si es posible el bicampeonato para leñadores o si tendremos nuevo campeón en la Serie Nacional de Béisbol. Allí estaremos para contarle.