POR JORGE EBRO
Un mes. Cuatro semanas. Raisel Iglesias tuvo más que suficiente descanso en ese lapso de tiempo antes de volver a los entrenamientos diarios en los terrenos de Miami. El llamado a la primavera está al doblar de la esquina y el cerrador de Cincinnati quiere legar mejor que nunca.
Vivió una campaña llena de contrastes en el 2019. Su efectividad terminó por encima de 4.00 y malogró seis oportunidades de rescate, pero implantó una marca personal con 34 salvamentos y los Rojos esperan una contienda mucho más sólida de su taponero.
Poco a poco se va acercando a una meta muy buscada: los 40 fuegos apagados, algo que ni siquiera su amigo y compatriota Aroldis Chapman ha podido lograr en una ilustre carrera de Grandes Ligas. Quizá para Iglesias este sea el año.
“He trabajado bastante para eliminar las deficiencias del año pasado. Sabemos que la temporada de Grandes Ligas es bien larga. Hay que estar muy preparado para durar y mantenerme saludable. Creando la fundación en el invierno para la durabilidad hasta el otoño’‘.
¿Cómo contemplas ahora la temporada del 2019?
“Mitad y mitad, cincuenta y cincuenta, con altos y bajos. Nunca antes había perdido 12 juegos, malogré varios salvamentos. Pero también impuse una marca de rescates con 34. Quien sabe si con esas seis oportunidades derrochadas hubiera llegado a 40 salvados’‘.
Siento que esa cifra de 40 es como una meta muy importante.
“No cabe duda. Pienso en ese número constantemente. Cada vez me voy acercándome. Primero logré 30, ahora 34. Créeme que haré todo en mi poder para llegar a 40, porque es una cifra que significa mucho para un cerrador. Habla mucho y bien de tu trabajo. Desde que se fue Aroldis Chapman del equipo esa ha sido mi meta. Eso no sale de mi cabeza’‘.
¿Cómo es tu relación con Chapman?
“Durante la temporada conversamos prácticamente cada dos días. El día en que algo me sale mal él me escribe, intercambiamos ideas. Cuando le sucede a él, entonces le escribo yo. Tenemos una buena química y nos ayudamos uno al otro’‘.
¿Qué esperas de la temporada que viene?
“Quiero rebasar todos mis números. Lo negativo queda en el pasado. La meta, más de un número u otro, es mejorar cada día. Esta es una pelota en la cual no puedes confiarte y debes entregarte al máximo. El nivel de competencia es brutal, muy fuerte. Voy con la mentalidad de que siempre debo probarme a mi mismo’‘.
¿Has disfrutado de tu familia en esta época?
“Trato de hacerlo al máximo. De estar con mis dos hijos. Cuando se acaba la temporada en septiembre, yo me tomo solamente un mes de vacaciones, pero desde que comienza noviembre empiezo a trabajar de nuevo hasta febrero que me voy a los entrenamientos’‘.
¿Cómo se sintió la salida de Yasiel Puig de los Rojos?
“Puig es un atleta dinámico, que siempre está conversando, haciendo jaranas. Es muy distinto a los americanos que son más callados y tranquilos. A nosotros nos gusta el béisbol con salsa y eso molesta a veces. Pero Puig es dinámico. Ese es su juego’‘.
En general, ¿cómo viviste el 2019 de todos los cubanos en las Mayores?
“Muy contento. Cada vez que llega un cubano a Grandes Ligas y tiene resultados eso nos da mucha alegría a los que ya estamos establecidos, porque vemos que el talento continúa, que las puertas se siguen abriendo’‘.
(Tomado del Nuevo Herald)