Escrito por Mario Martín Martín
Algunos —y algunas— no vieron con buenos ojos el calificativo de “oveja negra del béisbol avileño” que le endilgué al equipo Sub 23 años de béisbol de la central provincia de Ciego de Ávila, pocos días antes de iniciarse el Campeonato Nacional de esa categoría: “está un tanto despectivo”, me dijeron, y a todos les respondí: “pero lo es, hasta tanto se demuestre lo contrario”.
Leodanis Santiesteban ya suma dos triunfos en la lid
Y al menos en estos primeros ocho partidos, la tropa que dirige Pedro Gayón quiere demostrarlo, con sus seis victorias en ocho salidas, a solo cuatro de superar el total de las conseguidas en toda la campaña anterior.
Los avileños lideran el grupo C a juego y medio de Sancti Spíritus, dos y medio de Camagüey y cuatro de Las Tunas.
Desde este miércoles y hasta el sábado los líderes enfrentarán precisamente a su más cercano perseguidor en el estadio José Antonio Huelga y es significativo que sean superiores a los del Yayabo en los tres aspectos esenciales: defensa (964-960), pitcheo (2,55-2,92) y ofensiva (256-241).
De los avileñitos, en lo que va de contienda sobresalen las actuaciones del jardinero central Roy Echemendía y del lanzador zurdo Yunser Corrales. El primero promedia 458 y sobresaliente OPS de 1 161, mientras que Corrales no solo ya suma dos éxitos, sino que ha ponchado a 17 bateadores en 13 entradas y su PCL es de solo 0,69. Agréguese a esto que su WHIP es de 0,85.
Debo confesar que antes de iniciar el calendario en varias oportunidades conversé con varios de los integrantes del cuerpo de dirección, y coincidían en que este podrá ser, o no, el mejor o peor equipo de la competencia, pero sí que llegaría a ella con una buena preparación.
Y ese presupuesto se está haciendo verdad en el primer segmento, aunque todavía queda “mucha carretera” por recorrer antes de que termine la fase clasificatoria el 4 de julio venidero.