Escrito por Darilys Reyes
Este sábado comienzan en Caibarién una serie de despedidas al receptor Ariel Pestano. A ello se unen varias luminarias del béisbol nacional.
Polémico y reconocido siempre, sumando seguidores en una larga lista de detractores y admiradores, dice adiós al deporte activo el máscara villaclareño Ariel Pestano. Se despide una de las últimas estrellas de aquella otra generación de gloria del béisbol cubano y, desde su mismo firmamento, el cienfueguero Adiel Palma le saluda.
—¿Cómo definirías a Pestano?
—Como una persona preocupada por su trabajo. Como atleta, siempre estuvo pendiente del detalle, buscando superarse: activo todo el tiempo, ayudando a sus compañeros. Incluso desde el banco era el receptor que estudiaba a los lanzadores: cómo recibirles, conocía sus repertorios… Cuando entraba al terreno iba con tanta seguridad que en ocasiones le lanzaron sin señas y te digo, pitchers de 95 y 96 millas: lo que tiraran para allá lo recibía”.
—¿Se entendían bien?
—Me sentí muy bien trabajando con él: cuando un pitcher encuentra un receptor así, siempre lo pide. Nos conocíamos tanto que solo de mirarnos sabíamos qué pensaba el otro. Eso te da la medida de lo inteligente y excelente receptor que es Pestano.
«Recuerdo una anécdota del I Clásico Mundial, contra Holanda: no recuerdo al bateador, pero me dio un rolling al box que cogí y sacamos el doble play. En ese momento se me acercó jocosamente Pestano y me dijo:”mi perro cazó una mosca” y esa foto anda por ahí, de los dos riéndonos».
—¿Le aconsejarías algo en esta nueva etapa de su vida?
—El retiro es una situación difícil para un atleta: si uno está consciente que llegó la hora, no queda de otra y debemos asumirlo. Comienza una etapa de transmitir las experiencias, si así él lo decidiera, y solo resta hacerlo de la mejor manera posible. El respeto se cultiva, no se impone”.
—Si te pidieran ubicar a Pestano en un top de los mejores receptores de Cuba, de varios con los que pudiste jugar: ¿cuál sería su número?
—Imagínate: de mis tiempos están Alberto Martínez, Juan Castro, Manrique… Muy buenos, muy buenos. Coincidí también con Roger Machado y si no le hubiese pasado lo de la muñeca, todavía estaría jugando … Pero viví la época de Pestano y para no ser injusto con nadie, te digo que entre los tres mejores receptores de Cuba está Ariel Pestano.