Por Ian Browne
FORT MYERS, Florida — Hay varias figuras en el talentoso roster de los Medias Rojas para esta temporada. Pero un bateador en la parte gruesa de la alineación será el único que llamará la mayor atención de los lanzadores oponentes y los exigentes aficionados de Boston.
J.D. Martínez será el jugador a seguir en los Patirrojos del 2018, por varios motivos.
Primero, está el hecho de que tiene tanto trueno que el agente Scott Boras lo apodó el “King Kong del Tolete”. Luego está el hecho de que es una nueva adición para un ya talentoso conjunto que consiguió 93 victorias en cada uno de los últimos dos años, aunque en ambas campañas fue eliminado en la Serie Divisional de la Liga Americana. Además, todos quieren ver cómo el resto del grupo puede mejorar con sólo la influencia de Martínez.
Se debe tener en cuenta que varios jóvenes en los Medias Rojas del 2016 tuvieron las mejores temporadas de sus carreras en el plato mientras el dominicano David Ortiz todavía estaba en la parte gruesa del lineup.
Claro, no es coincidencia que varios de esos mismos jugadores tuvieran un ligero descenso el año pasado tras la partida de Ortiz — y no pudieron llenar ese vacío.
Ahora ha llegado el “reemplazo” de Big Papi, algo que favorecería a todos.
No cabe duda de que un bateador de alto impacto puede marcar una enorme diferencia en una alineación.
“No sé si protegerá a alguien, pero estoy seguro de que nuestros oponentes atacarán el lineup de una manera diferente, porque él es muy peligroso con hombres en base”, manifestó el dirigente de los Medias Rojas, puertorriqueño Alex Cora. “Es posible que sean más agresivos con los primeros dos o tres muchachos antes que él y que ellos puedan aprovechar la oportunidad. No significa que estén protegidos, sino que los demás están mejorando. Es un lineup bien equilibrado”.
Los Medias Rojas, con Martínez en medio de toda la acción, podrían convertirse en una alineación que nadie quiera enfrentar.
“Es un equipo más profundo. Estamos hablando de clubes como los Indios, Astros, Nueva York (Yankees), todos esos equipos ofensivos”, señaló Cora. “Con él pienso que estamos a la altura de ellos”.
Los Patirrojos ya parecen estar hablando más de estudiar el bateo con Martínez en el equipo.
“Estamos muy contentos con J.D. y no sólo eso, como dije antes, sino lo que ofrece en el clubhouse”, expresó Cora. “Ahora veo más iPads.
“Mucho se habló del vacío que dejó David; necesitaban a alguien que lo llenara. No digo que J.D. sea ese muchacho, pero al menos a su manera, trae bastante sabiduría, liderazgo y ayuda a los otros muchachos con los planes, que es algo maravilloso”.
Lo que será interesante ver con Martínez al comienzo es cómo se acoplará al Fenway Park. Todos saben lo tentador que es el Monstruo Verde a apenas 310 pies del plato. Pero Martínez no hala la bola. De hecho, le encanta batear hacia el jardín derecho y el canal entre el bosque central y el derecho.
El quisqueyano Manny Ramírez tenía la misma estrategia y tuvo un gran éxito en el Fenway. Lo mismo ocurrió con el Salón de la Fama Jim Rice.
“Vieron lo que hizo Manny”, dijo Cora. “La gente habla sobre el Fenway, lo grande que es hacia el jardín derecho y el canal. Para él no es un inconveniente. Si sigue con su mentalidad — y les apuesto que continuará así — creo que el muro hasta lo ayudará porque enviará las rectas hacia los canales entre la pradera central y la derecha. Cuando quede una en medio del plato, la halará con poder”.
Martínez, quien ha jugado apenas siete veces en el Fenway como visitante, no dará su opinión hasta juegue en el estadio con los Medias Rojas esta temporada.
“Estoy indeciso”, manifestó Martínez. “La mayoría de mi trueno y mi fuerza es hacia la banda contraria. Pero también les pego a rectas hacia el jardín izquierdo. Es algo que esperaremos para ver qué sucede. Varias de esas bolas que serían elevados al bosque izquierdo probablemente sean jonrones, pero será parejo porque varias de mis batazos al jardín derecho que hubiesen sido jonrones probablemente sean outs. Sólo espero que haya un equilibrio. No cambiaré mi estrategia. Continuaré con lo que me ha dado resultados”.
Para los Medias Rojas, eso estaría muy bien. Hay un motivo por el que Martínez fue el único jugador en la mira del presidente de operaciones de béisbol de Boston, Dave Dombrowski, durante toda la temporada muerta. Era evidente que Martínez era el único bateador disponible que les brindaría a los Patirrojos lo que les faltaba.
Y ahora estará en medio de toda la acción, tratando de que el equipo llegue lejos en octubre.
“Espero poder hacer bastante daño. Ese ha sido el plan desde que llegué”, expresó Martínez.