VILLA CLARA.—Antes de iniciarse la postemporada, en esta misma página dije que nadie podía saber qué equipo sería el ganador de la actual campaña. Sin embargo, expresé entonces que sería muy difícil vencer al campeón defensor, Ciego de Ávila.
Pero la pelota solo entiende de lo que pase en el terreno y ya la semifinal entre los vigentes monarcas y Villa Clara anda empatada a dos triunfos por bando. Después del soberbio arranque, los avileños han caído en dos ocasiones en la ciudad naranja, el Augusto César Sandino.
Y claro que no ha sido fácil para los villaclareños, pues a sus contrarios solo se le puede doblegar cuando hay una dupla como la de ayer sobre el montículo. Primero Yosvani Torres, quien en el rol de abridor estuvo inmenso hasta el quinto donde soportó fuerte castigo y luego un aguerrido Alberto Bisset, del que también habíamos dicho que le aportaría al bullpen de los leopardos experiencia y combatividad.
En el partido hubo que lamentar la expulsión del lanzador Arioski Fernández y la del director de los tigres, Roger Machado, tras el pelotazo del primero a Michael González. Ambos mentores estaban advertidos por los árbitros sobre una situación que pudiera desestabilizar el choque.
Se sabe que en el béisbol hay muchas reglas no escritas, supuestos comportamientos éticos o códigos de respeto. En apariencia el que va delante por cinco carreras no ordena el robo de base, pero el que está perdiendo tampoco debería retirar la custodia de los hombres en circulación. Era el cuarto episodio y ni siquiera esa ventaja podía dar por decidido el duelo. Lo cierto es que hubo robos a mansalva y de la misma manera el bateador Michael González fue golpeado. Por suerte, llegó la calma y la tempestad se aplacó, tras cinco jits, dos wild, tres robos de base y un pelotazo.
Si fue o no a propósito, si respondía o no una estrategia de los visitantes, lo cierto es que el abridor Yosvani Torres después de casi 45 minutos no volvió a ser el mismo y le cayeron arriba hasta sacarle de la lomita. Mario Vega, quien suplió a Machado, nos dijo que sí, que ellos retiraron la vigilancia sobre el corredor, pero no ordenaron tirarle la pelota al bateador. En definitiva, Ciego de Ávila se metió en el partido y anotó tres en la parte alta de la quinta, al ligar cuatro jits, un error y un boleto.
En mi opinión era suficiente materia prima para anotar más que tres, sino llega a detenerse en tercera Dainier Gálvez tras el imparable de Edilse Silva.
Vega nos había afirmado antes del choque que «los playoff están muy buenos; como siempre, es el momento más alto de la temporada». ¿Y cómo se ha puesto este?, le preguntamos al concluir el de ayer. «Mejor, nos han ganado dos juegos de pelota muy buenos, pero no hay nada perdido, mañana (hoy) Vladimir García debe sacarnos adelante y en nuestra tierra daremos el tiro de gracia».
Vladimir Hernández, timonel de los leopardos anaranjados expresó que enviará a Freddy Asiel Álvarez, de quien dijo sentirse «muy confiado. Está motivado y estas dos victorias lo multiplicarán. Hemos demostrado mucha garra y creo que nuestra exigente afición, a la cual nos debemos, sabe valorar cuando un equipo lo da todo en el terreno, estamos en un excelente momento y no lo desaprovecharemos. No, la alineación ha ganado dos juegos seguidos, no la cambiaré».
Y quien vio los tres primeros innings con un duelo entre pinareños, Torres y Erly Casanova, no solo no hubiera imaginado el cuarto inning naranja o el quinto de Ciego de Ávila. Pero la verdad es que esos vientos nos trajeron otras dos destacadas actuaciones desde la tabla de lanzar con los relevos de Alberto Bisset y del talentosísimo Raydel Martínez, otro vueltabajero, refuerzo de los aún campeones, aunque Villa Clara resurge y reta.
Anotación por entradas |
||||
A. C. Sandino |
C |
H |
E |
|
CAV |
000 030 000 |
3 |
8 |
1 |
VCL |
001 400 00X |
5 |
9 |
1 |
G: Alberto Biset (1-0). P: Erly Casanova (2-6). |