Por: Yordano Carmona
Rusney Castillo sigue “estancado” en las menores a pesar de tener talento de Grandes Ligas.
Hace dos dias el periodista Alex Speier del Boston Globe decía en un tweet que no entendía el porqué Rusney seguía en Triple A si Boston había pasado el umbral de 237 millones de su nómina y las penalidades por romper el impuesto de lujo ya eran una realidad.
Sin tocar el complejo tema económico y gerencial de Boston y sólo hablar de los números en el terreno les comentamos que nadie ha bateado más que el cubano desde la temporada pasada en Triple A. El avileño ha sido seleccionando dos veces consecutivamente al juego de las estrellas del nivel más avanzado de las menores y actualmente el el lider en bateo de la Liga Internacional con 323. Castillo también es líder en hits con 126 y tercero en dobles con 26. Sus 50 remolques es por mucho lo mejor de su equipo y a pesar de estar lesionado por algunos partidos está entre los diez primeros en otros departamentos. Todo esto nos deja claro que el cubano no está en la Gran Carpa por su rendimiento sino por factores fuera del terreno los cuales se explicaremos en el siguiente párrafo.
La excusa de la gerencia de Boston no era otra que si traían a Rusney al primer equipo sus 11 millones de salario se sumarían al presupuesto de la nómina y se pasarían del límite del impuesto de lujo de 237 millones de salario y eso conllevaría a serias penalidades tanto en lo económico como en lo deportivo.
Esa excusa se rompió cuando el 31 de julio llegó Ian Kisnler en cambio procedente de los Angelinos y se pasó el límite establecido. Ahora mismo no hay excusa para no traerlo salvo que no está en el roster de los 40 hombres pero eso tampoco sería excusa.
Castillo firmó por $72.5 millones y sólo vio acción en 99 partidos de Las Mayores donde promedió 262 con 7 jonrones, 7 bases robadas y un OPS de 679.
Defensivamente no es un Jackie Bradley Jr. pero sacó a 7 corredores tratando de alcanzar una base extra, demostrando que el brazo está ahí y su velocidad le permitiría cubrir muchismo terreno.
Básicamente Castillo ha probado en sus últimas dos temporadas en Triple A que al menos merece una segunda oportunidad en Fenway Park.
Es verdad que Boston posiblemente tenga el mejor jardín de la Mayores con Mookie Betts y Benintendi inamovibles y un JBJ que ha salido del slump y está mucho mejor al bate sin hablar de su defensa que es de las mejores de MLB y un JD Martínez que si bien se alterna para jugar en los jardines es prácticamente un designado.
Los Medias Rojas van camino a una temporada histórica camino a los Play Off con el mejor récord de todo el béisbol y enfocados en ganar. Para ganar necesitarán a sus mejores jugadores disponibles y Castillo pertenece a ese grupo. Ahora mismo no hay ninguna excusa para que el avileño no este usando el uniforme de Boston ahora mismo en Grandes Ligas.