El receptor cubanoamericano Nick Fortes está generando opiniones positivas en este inicio de campaña vistiendo la camisa de los Marlins de Miami. Sobre algunos aspectos de su vida y de su rendimiento actual el joven enmascarado conversó con Pelota Cubana.
¿Cómo fue el crecer en un ambiente cubanoamericano?
«Fue algo maravilloso, compartiendo con mis abuelos, con el aroma de la comida de mi abuela, las fiestas como la Noche Buena, Es cultura que siempre llevamos y es algo muy emocionante».
¿Qué te contaban de Cuba?
«Mi padre nació en Holguín y vino para los Estados Unidos cuando tenía unos seis o siete ninos de edad. Me hablaban de las dificultades, de la pobreza, de lo difícil que era vivir allá y de que era mucho más fácil vivir aquí por el sistema».
¿Disfrutas de alguna tradición cubana?
«Todo, sobre todo en la comida. Mi comida favorita es picadillo. Mi padre cocina una tremenda ropa vieja. Amo los pastelitos y es algo que sigo disfrutando mucho».
¿Cuán especial es jugar en Miami, tan cercano a esas raíces?
«Es algo especial. Mi papá está encantado. Crecí en Miami. Nací en Hialeah. Tengo muchos familiares que todavía viven en la zona. De modo que es muy bonito estar tan cercano a esa parte de mi vida. Es maravilloso de que sea así».
Sin dudas el talentoso receptor se ha complementado muy bien con su compañero de posición Jacob Stallings para brindar a los Marlins de una muy buena versión de la receptoría, algo que no se veía desde la salida del ahora catcher de los Phillies de Philadelphia de JT Realmuto. Es una noticia muy favorable para los seguidores de los campeones de la Serie Mundial de 1997 y de 2003, claro en aquella ocasión todavía la franquicia presentaba el nombre de los Marlins de la Florida.
Hasta el momento promedia .160 a la ofensivsa con un cuadrangular y tres carreras empujadas. El máscara de 26 años todavía puede aportar más a la causa de los delfines pues en su carrera como jugador de las Grandes Ligas del Béisbol estadounidense presenta .231 de promedio de bateo, .300 de porcentaje de embasado con 14 vuelacercas 34 compañeros traídos para el plato.
Su primera temporada en el mejor béisbol del mundo fue en 2021 donde promedió para .290 a la ofensivsa con un total cuatro cuadrangulares y siete carreras empujadas. Ese año solo tuvo 31 veces al bate donde pegó nueve imparables con ocho ponches y cuatro boletos. Su porcentaje de embasado fue de .353 y un slugguing .667. Su OPS llegó a 1.030. Con corredores en circulación bateo para .263 en su año de novato.
En 2022 mostró más su poder con nueve cuadrangulares y 24 remolques en 217 donde anotó en 41 ocasión. Con los Marlins pegó 50 imparables su mayor cantidad hasta el momento. Se espera que este año supere todas esas estadísticas debido a que tendrá mayor volumen de juego desde la receptoría. Esta puede ser una temporada donde se consagre y se afiance en el primer equipo.