El 2023 fue testigo de otra campaña exitosa para los cubanos en el mejor béisbol del mundo. Un total de 27 compatriotas (cuatro de ellos debutantes) vieron acción en las Grandes Ligas, con lauros individuales, récord de participantes en el Juego de las Estrellas y anillos de Serie Mundial como notas más relevantes. Al desempeño de cada uno de ellos dedicaremos este trabajo y los siguientes, en un resumen de lo que ya resulta un año relevante para la armada cubana en la MLB.
Adrián Morejón (# 50, L, Padres de San Diego): El mayabequense sufrió una lesión durante los entrenamientos de primavera que marcó su trayectoria, por lo cual inició el año en las Menores y allí estuvo la mayor parte del tiempo, actuando en tres niveles (Clase Rookie – Clase A – Triple A), con números poco favorables a nivel global. En 24 salidas (apenas cinco como abridor) acumuló tres victorias y una derrota, con 6.14 de PCL en 29.1 entradas, 37 ponches, 14 boletos y un WHIP de 1.64. Fue promovido a las Mayores en el mes de junio y en ocho apariciones (siete de ellas como relevista) no tuvo decisiones, con efectividad de 7.00 (siete carreras limpias en nueve innings), ocho ponches, cinco boletos, average rival de 368, WHIP de 2.11 y WAR de -0.2. A sus 24 años aún tiene pendiente estabilizarse en la MLB y firmar una temporada acorde a las proyecciones que desde pequeño dejó ver.
Salario en el 2023: 800 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2019-2023):
G-P: 7-3, JL: 50, PCL: 5.28, INN: 75, SO: 73.
Aroldis Chapman (# 54 y 45, L, Reales de Kansas City y Vigilantes de Texas): El holguinero tuvo una campaña de regreso a los niveles de calidad exhibidos previamente, ahora en el nuevo rol de lanzador del octavo episodio fundamentalemte. Inició el año con los Reales y allí atrajo la atención de los especialistas que lo daban por acabado. En 31 salidas sumó cuatro victorias y dos derrotas, con dos juegos salvados, PCL de 2.45 (ocho carreras limpias en 29.1 episodios), 53 ponches, 20 boletos, y WHIP de 1.23. No sorprendió entonces que los Vigilantes de Texas, equipo en plena lucha por acceder a la postemporada, lo llamara a sus filas a mediados de campaña. Con ellos laboró en 30 encuentros, con dos triunfos, tres descalabros, cuatro salvamentos, PCL de 3.72 (12 anotaciones limpias en 29 capítulos), 50 ponches, 16 boletos y un WHIP de 1.28. Sumando ambas escuadras, en 61 partidos alcanzó marca de 6-5, con seis juegos salvados (de 11 posibles), 14 holds, efectividad de 3.09 (20 anotaciones limpias en 58.1 innings), 103 ponches, 36 pasaportes gratis, frecuencia de 15.9 ponches por cada nueve entradas, WHIP de 1.25 y WAR de 1.4. En la postemporada también sobresalió y se coronó campeón de la Serie Mundial, su segundo título tras el obtenido con los Cachorros de Chicago en 2016. En nueve duelos (Serie de Comodín de la Liga Americana – Serie Divisional – Serie de Campeonato – Serie Mundial) no tuvo decisiones, con PCL de 2.25 en ocho innings (dos carreras permitidas), seis ponches, cinco boletos y WHIP de 1.50. En el Clásico de Otoño (ganado 4-1 sobre los Diamondbacks de Arizona) trabajó en dos desafíos, con PCL de 5.40 en 1.2 episodios, par de ponches, un boleto y WHIP de 1.80. A nivel histórico se ubica en el puesto 21 (igualado con el dominicano José Mesa) en juegos salvados en las Mayores. En esa relación se ubica cuarto entre los pitchers siniestros (solo por detrás de John Franco, Billy Wagner y Randy Myers, en ese orden) y tercero entre los lanzadores activos, a la escolta de Kenley Jansen (420) y Craig Kimbrel (417). Actualmente es agente libre. Salario en el 2023: 3 750 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2010-2023):
G-P: 50-40, PCL: 2.53, JL: 728, JS: 321, EL: 698.1, SO: 1148, BB: 354, WHIP: 1.08, SO/9: 14.8.
Cionel Pérez (# 58, L, Orioles de Baltimore): El matancero solo tuvo una aparición en las Menores, un juego que lanzó en el mes de julio en Doble A y donde no permitió libertades. El resto del tiempo se lo pasó en la MLB con los Orioles, firmando otro destacado año. En 65 salidas (siempre como relevista) obtuvo cuatro victorias y dos derrotas, tres juegos salvados, once holds, PCL de 3.54 (21 carreras limpias en 53.1 innings), con 44 ponches y 27 boletos, average rival de 264, WHIP de 1.56 y WAR de -0.3. En la postemporada los Orioles cayeron en la Serie Divisional de la Liga Americana (0-3 ante los Vigilantes de Texas) y en dos apariciones tuvo PCL de 0.00 en 1.2 entradas, con cuatro cafecitos, un boleto y WHIP de 1.20.
Salario en el 2022: 732 400 dólares.
Números de por vida en la MLB (2018-2023):
G-P: 13-6, PCL: 3.56, EL: 161.2, SO: 151, WHIP: 1.42.
Daysbel Hernández (# 75, L, Bravos de Atlanta): El pinareño vio hecho realidad su sueño de lanzar en las Grandes Ligas. Inició el año en las Menores y estuvo en tres niveles (Clase A Avanzada – Doble A – Triple A), donde en 23 apariciones, siempre en rol de relevo, obtuvo marca de 3-0, con dos juegos salvados, PCL de 2.19 en 24.2 innings, 36 ponches, 13 boletos y WHIP de 0.97. Tras ello fue ascendido a MLB y en cuatro relevos obtuvo una victoria sin derrotas, con PCL de 7.36 (tres carreras limpias en 3.2 entradas), seis ponches, tres boletos, average rival de 353, WHIP de 2.45 y un WAR de -0.1. En la postemporada lanzó un desafío en la Serie Divisional de la Liga Nacional (versus los Phillies de Filadelfia), sin acumular decisiones, con efectividad inmaculada y un boleto en una entrada de labor.
Salario en el 2023: 720 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2023):
G-P: 1-0, PCL: 7.36, SO: 6.
Johan Oviedo (# 24, L, Piratas de Pittsburgh): El capitalino vivió su mejor año en la MLB, siendo uno de los principales lanzadores en la rotación de los filibusteros. En casi todos los departamentos firmó marcas personales en su corta carrera como jugador de Grandes Ligas. Trabajó en 32 encuentros, siempre como abridor, con nueve triunfos y 14 descalabros, un juego completo, una lechada, PCL de 4.31 (85 carreras limpias en 177.2 entradas), 158 ponches, 83 boletos, 13 pelotazos, average rival de 237, WHIP de 1.37 y WAR de 2.1. Fue líder en average defensivo como lanzador (1000), tercero en lechadas, quinto en derrotas, noveno en juegos completos y décimo en juegos iniciados en toda la MLB, igualado con varios pitchers en todos esos casos. También fue segundo en pelotazos propinados (con idéntica cifra a Reid Detmers, de los Angelinos) y tercero en boletos en la MLB (empatado con el veterano Charlie Morton, de los Bravos). En la Liga Nacional quedó líder en lechadas (junto con varios serpentineros), pelotazos y average defensivo como lanzador (igualado a 1000 con varios pitchers), segundo en pasaportes gratis y reveses, cuarto en juegos iniciados, en completos y en outs realizados como pitchers (19) y octavo en carreras limpias permitidas. Desde 1998 hasta 2010 hubo siempre al menos un abridor cubano con 30 aperturas en Grandes Ligas, pero en los últimos 12 años ningún lanzador de la isla había alcanzado esa cifra. El encargado de romper el maleficio ha sido Oviedo, quien sumó 32 aperturas en un 2023 de muy buen nivel con los Piratas. El derecho registró 14 aperturas de calidad, la mayor cantidad para un lanzador cubano desde José Fernández, quien sumó 19 en 2016.
Salario en el 2023: 735 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2020-2023):
G-P: 13-25, PCL: 4.32, SO: 279, EL: 320.2.
Néstor Cortés Jr. (# 65, L, Yankees de Nueva York): Las lesiones afectaron el accionar de una de las revelaciones de la escuadra cubana el pasado año y sus números quedaron distantes de lo exhibido en 2022. Apenas pudo lanzar en doce desafíos (todos como abridor), con cinco éxitos y dos reveses, PCL de 4.97 (35 carreras limpias en 63.1 episodios), 67 ponches, 20 boletos, average rival de 244, WHIP de 1.25 y WAR de 0.5. Como parte de su rehabilitación tuvo dos salidas en Doble A, con dominio inobjetable en ese nivel (nueve cafecitos en 6.1 capítulos de actuación y PCL de 1.42). Salario en el 2023: 3 200 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2018-2023):
G-P: 24-11, PCL: 3.82, SO: 413, EL: 393.2, WHIP: 1.17.
Raisel Iglesias (# 26, L, Bravos de Atlanta): El pinero volvió a tener otro año relevante en las Mayores, asentado como cerrador en una de las franquicias de mayor calidad actualmente en el béisbol. En 58 apariciones viniendo del bullpen acumuló cinco victorias y cuatro derrotas, con 33 juegos salvados (de 37 posibles), PCL de 2.75 (17 carreras limpias en 55.2 innings), 68 ponches, 15 boletos, frecuencia de 11.0 ponches por cada nueve entradas, average rival de 238, WHIP de 1.19 y WAR de 1.2. Fue octavo en juegos salvados en la MLB (empatado con el dominicano Félix Bautista, de los Orioles y Josh Hader, de los Padres de San Diego) y quinto dentro de la Liga Nacional (junto con Hader). También actuó brevemente con la sucursal de Triple A, con cinco ponches en tres capítulos y WHIP de 0.67. En la postemporada lanzó tres veces en la Serie Divisional de la Liga Nacional (ante los Phillies de Filadelfia), con un juego salvado, dos ponches y ningún boleto en 2.1 innings, PCL de 0.00 y WHIP de 0.00.
Salario en el 2023: 16 000 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2015-2023):
G-P: 32-47, PCL: 2.97, JS: 190, EL: 599.1, SO: 728, WHIP: 1.09, SO/9: 10.9.
Víctor Mederos (# 58, L, Angelinos de Los Ángeles): El villaclareño vivió su estreno en Grandes Ligas pero antes pasó por las Menores, particularmente por Doble A, donde en 20 salidas (todas como abridor) sumó cuatro triunfos y nueve reveses, con elevado PCL de 5.67 en 92 capítulos, 99 ponches, 43 boletos y un WHIP de 1.48. Fue séptimo en derrotas dentro de la Liga del Sur (Doble A). Pese a que sus números globales no fueron exitosos la gerencia de los Angelinos confió en él y lo promovió al equipo grande, donde laboró en tres desafíos (siempre como relevista), sin decisiones a su cuenta, con efectividad de 9.00 (tres carreras limpias en igual cantidad de innings), tres ponches, similar cifra de boletos, average rival de 417, WHIP de 2.67 y un WAR de -0.1.
Salario en el 2023: 720 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2023):
G-P: 0-0, PCL: 9.00, SO: 3.
Yennier Cano (# 78, L, Orioles de Baltimore): La gran sorpresa entre los lanzadores antillanos este año fue el avileño Cano, consolidado como exitoso preparador dentro del cuerpo de relevistas de los Orioles. Lanzó como nunca antes y la constancia fue una de sus cualidades a lo largo de todo el año, participando en el Juego de las Estrellas. En 72 salidas (siempre como relevista) tuvo más derrotas (4) que victorias (1), pero acumuló ocho juegos salvados (de 14 posibles), 31 holds (líder en la Liga Americana y la MLB, empatado en ambos casos con el dominicano Héctor Neris, de los Astros), con efectividad de 2.11 (17 carreras limpias en 72.2 entradas), 65 ponches, 13 boletos, average rival de 226, WHIP de 1.00, frecuencia de 8.1 ponches por cada nueve capítulos y un WAR de 2.5. A nivel de MLB fue noveno en juegos lanzados (igualado con el dominicano Bryan Abreu, de los Astros de Houston y el también quisqueyano José Cuas, de los Reales y Cachorros).
En ese departamento fue quinto en la Liga Americana (junto con Abreu). En este último circuito quedó décimo en Probabilidad de Victoria Agregada (WPA, por sus siglas en inglés: 2.7). Sus 31 holds contituyen la tercera mejor cifra histórica para un novato, solo superado por los 34 del japonés Akinori Otsuka (Padres, 2004) y los 32 de Daniel Bard (Medias Rojas, 2010). En abril también intervino en tres encuentros en Triple A, con PCL de 0.00, cuatro ponches y ningún pasaporte gratis. En la postemporada lanzó dos veces en la Serie Divisional de la Liga Americana (frente a los Vigilantes de Texas), sin decisiones, sin ponches y con un boleto en 1.1 innings y un PCL de 6.75. Sorpresivamente no recibió ni un solo voto en las votaciones para el Novato del Año de la Liga Americana, cuando por números y méritos reunía condiciones para estar entre los tres finalistas.
Salario en el 2023: 720 000 dólares.
Números de por vida en la MLB (2022-2023):
G-P: 2-5, JS: 8, PCL: 3.97, SO: 86, WHIP: 1.27.
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