Los 4 bateadores más exitosos nacidos en la década de 1980 en Cuba, son hoy estrellas mundiales. Con magníficas carreras deportivas dentro y fuera de la isla, tienen un lugar de privilegio en los mejores rankings de la pelota cubana.
Alguno mucho más mediático que el resto, otro tan alabado como odiado, lo cierto es que marcan el panorama beisbolero cubano en este siglo XXI. Convertidos en estrellas dentro del torneo nacional y el propio equipo Cuba, fueron a mostrar su talento en otras tierras y podemos decir que muy bien les ha ido.
Dos de ellos nacidos en el oriente cubano y que vistieron el uniforme de Granma en varios campeonatos nacionales, Alfredo Despaigne y Yoenis Céspedes. Los otros dos del centro del país, el cienfueguero José Dariel Abreu y el espirituano Yulieski Gurriel.
Yulieski Gurriel, nacido en 1984, fue el primero en debutar en los campeonatos nacionales y en el equipo Cuba de mayores. En las Series Nacionales cubanas vistió los uniformes de Sancti Spiritus e Industriales acumulando fanáticos y detractores a lo largo de la isla. Tuvo un breve paso por la Liga Japonesa en 2014 y en 2016 decide poner rumbo hacia el mejor béisbol.
En julio del propio año firma con los Astros de Houston, logrando su sueño de llegar a las mayores el 21 de agosto. En cuatro temporadas en Grandes Ligas acumula 65 jonrones en 455 juegos, con promedio de 293 y 279 carreras impulsadas, siendo este 2019 su mejor año con 31 cuadrangulares y 104 producidas. En la temporada 2017 fue campeón con los Astros, algo que le fue esquivo en Cuba con sus dos equipos.
Yoenis Céspedes nació en 1985, natural de Campechuela en la provincia Granma, vistió los colores de su terruño durante ocho temporadas, logrando una marca de jonrones en el 2011, su último año en Cuba, con un total de 33 vuelacercas, record en ese momento empatado con José Dariel.
Logra su sueño de jugar en las mayores de la mano de los Atléticos de Oakland, debutando el 28 de marzo de 2012 y en siete temporadas en la gran carpa acumula 826 partidos con el uniforme de cuatro organizaciones distintas. Los últimos tres años se ha visto afectado por las lesiones, en el 2019 no pudo jugar ni un solo partido con los Mets, su equipo actual.
Su mejor temporada fue en el 2015, entre Detroit y New York jugó 159 partidos sacando 35 pelotas fuera. En sus años en Grandes Ligas suma 163 jonrones, 524 producidas, un OBP de 328 y promedio de 274. Su mayor hito en las mayores ha sido ganar el derby de jonrones del Juego de las Estrellas en años consecutivos, 2013 y 2014, logrado anteriormente solo por el estelar Ken Griffey Jr.
En 1986 nació Alfredo Despaigne en Contramaestre, Santiago de Cuba. Con el equipo Granma debuta en el campeonato cubano allá por el año 2004, en la serie nacional cubana posee números impresionantes, como el record de jonrones en una temporada con un total de 36.
Estuvo jugando en México con los Piratas de Campeche antes de llegar a la Liga Japonesa, donde se desempeña los últimos años. En la tierra de sol naciente tuvo su debut con los Marinos de Chiba Lotte, pero sus mejores números los tiene vistiendo el uniforme de Softbank.
En seis temporadas en Japón acumula 664 partidos entre Chiba y Softbank, con 154 jonrones y 452 carreras producidas. Con los Halcones suma tres títulos de la Serie de Japón de manera consecutiva, el más reciente este año.
El más joven de los cuatro, José Dariel Abreu, nació en 1987 en Cruces, Cienfuegos. Con el equipo de la Perla del Sur se convirtió en uno de los mejores bateadores de la última década, sus pugnas jonroneras con Céspedes y Despaigne son fieles testigos de ello, conectó 33 en 2011 logrando el liderato por menos veces al bate que Céspedes. En 2012 despachó 35 pelotas empatando a Despaigne que era el líder, pero el granmense lo remató al final.
En 2013 salió de Cuba para probar suerte en el béisbol profesional. Los Medias Blancas de Chicago le dan un contrato de seis años en 2014 y esa misma temporada se convierte en Novato del Año de la Liga Americana con 135 partidos a sus espaldas, conectando 36 jonrones y promedio de 317.
En seis temporadas con el equipo de Chicago participó hasta ahora en 901 juegos sumando 179 vuelacercas. Su promedio ofensivo es de 293 y totaliza 611 carreras impulsadas. En este último renglón lideró la Liga Americana este año con 123 producidas.
Estos cuatro muchachos sobresalen al resto de su generación desde sus primeros pasos en los terrenos cubanos. El uniforme de las cuatro letras los recuerda juntos logrando el subcampeonato mundial de 2009 en un gran torneo, muchos son los deseos de que sus destinos se crucen nuevamente bajo la bandera cubana, pero lo cierto es que tarde o temprano vamos a extrañar el talento de estos cuatro fantásticos en los terrenos de juego.