El granmense Roel Santos se ha caracterizado durante su carrera por cumplir cabalmente la función de primer bate, ser un seguro defendiendo la pradera central y una amenaza constante para la defensa de los equipos rivales una vez pisa las almohadillas. Ha jugado hasta la fecha en ligas de cinco países (Canadá, Japón, Colombia, México y Venezuela) y en todas ha lucido a gran nivel, exceptuando su periplo por la NPB, un circuito que generalmente busca a los latinos con poder en sus muñecas, herramientas distintas a las que ofrece el muchacho de Niquero.
El escenario donde más ha podido jugar ha sido la Liga Mexicana de Béisbol, con cuatro contiendas (2019, 2021-2023), siempre con los Olmecas de Tabasco. En este último torneo disputó 63 compromisos, en los que bateó para 310 (78 imparables en 252 turnos legales), con 45 anotadas, 16 dobles, cuatro triples, similar cantidad de vuelacercas, 30 remolques, ocho bases robadas en 14 intentos, 27 boletos, 36 ponches, un OBP de 382, slugging de 452 y OPS de 834.
Otra temporada por encima de .300 en suelo azteca para el granmense Roel Santos#LMB #BeisbolizaTuVida pic.twitter.com/HksRGIv0AB
— Ariel Santa Cruz (@ArielSCPE) August 14, 2023
Los números son meritorios y muestran constancia en su rendimiento. No obstante quedan por debajo de lo hecho en 2022 cuando firmó soberbio average de 411 (253-104) en 68 desafíos, remolcó exactamente la misma cantidad de anotaciones que en este año pero tuvo un mejor acierto a la hora de estafar almohadillas (16 de 22 intentos). Algo similar hizo en el 2019 y no pudo repetirlo dos años después por disputar apenas 16 partidos.
Lo cierto es que el primer bate de los alazanes de Granma ha cumplido plenamente con su rol en el béisbol mexicano y lo ha hecho tanto en la liga de verano como en la invernal, donde seguramente volveremos a verlo en poco tiempo. La pregunta ronda la mente, ¿hubiera podido ser un jugador de Grandes Ligas?. La respuesta no llegará porque el tiempo no da vuelta atrás en el calendario aunque visto lo hecho en estos años y la estabilidad de su rendimiento no dudaría en afirmar que sí.