Por Yusseff Díaz
Julio Pablo Martínez entró el 2019 como el prospecto #2 en la organización de los Vigilantes de Texas, pero al pasado no fue uno de sus mejores y descendió al #26 en la organización.
La temporada pasada disparó 14 vuelacercas, 21 dobles y remolcó 58 en , pero solamente bateó .248.
Otro problema que tuvo el jardinero guantanamero fue haciendo contacto, Martínez se poncho un 33.7% de sus veces al bate.
Sobre confianza y falta de reconocimiento de pitcheos también contribuyó a sus dificultades en la caja de bateo.
El guardabosques también tuvo sus problemas con rompimientos y lanzadores zurdos. Sus dificultades en contra serpentineros siniestros fue debido a la falta de lanzadores zurdos de calidad en la Serie Nacional, me explicó el cazatalento José Rafael Fernández.
«Hemos trabajado en reconocimiento de pitcheos y en manteniendo sus manos así atrás. La mayoría de sus ponches vinieron en rompimientos. También se enfrentó con una plenitud de lanzadores zurdos para tratar de darle más fogueo en contra ese tipo de pitcheo.», dijo Fernández.
El cubano empezara la próxima campaña en Down East Wood (A+) y la organización espera que Martínez con los ajustes que hizo en la temporada muerta logre ascender en la granjas del conjunto tejano.
¿Regresará a forma el antillano con el invierno productivo que tuvo?
Nada más el tiempo nos dira….
