En lo que representa un duro golpe para las Grandes Ligas, el Juego de Estrellas de la MLB de 2023 ha registrado una disminución significativa en la audiencia, marcando un mínimo histórico por segundo año consecutivo, según informes de múltiples fuentes. A pesar de que la Liga Nacional se alzó con la victoria después de una sequía de 11 años, el partido apenas logró una media de 7.006 millones de espectadores en el canal Fox. Esta cifra representa un descenso del 10 por ciento con respecto al año pasado, cuando ya se había establecido un mínimo histórico de 7.507 millones de espectadores.
Aunque las cifras generales de audiencia son decepcionantes, hubo algunas tendencias positivas en segmentos demográficos específicos. Según informa Austin Karp, del diario The Sports Business Journal, la audiencia masculina de entre 18 y 49 años aumentó un 6 por ciento, mientras que entre los hombres de 25 a 54 años hubo un incremento del 4 por ciento. Además, el partido logró atraer la mayor audiencia en horario estelar de la televisión desde el quinto partido de las Finales de la NBA en junio, que reunió a más de 13 millones de espectadores.
A pesar de esta disminución en la audiencia, el Juego de Estrellas de la MLB sigue siendo el evento de estrellas más visto en el ámbito deportivo. Este año, el Pro Bowl de la NFL logró una media de 6,28 millones de espectadores, mientras que el Juego de Estrellas de la NBA tuvo 4,59 millones. Sin embargo, la tendencia descendente en la audiencia plantea serias preocupaciones acerca del atractivo a largo plazo del Juego de Estrellas de la MLB.
Estos mínimos históricos de audiencia en años consecutivos indican que el Juego de Estrellas ha estado luchando para mantener su popularidad. De hecho, según Sports Media Watch, en cinco de los últimos siete años en los que se ha disputado el Juego de Estrellas (2016, 2018, 2019, 2022 y 2023) se han registrado mínimos históricos de audiencia. En 2014, el partido atrajo a 11,34 millones de espectadores, mientras que hace 20 años, en 1994, alcanzó la cifra asombrosa de 22 millones de espectadores.
La MLB ha intentado implementar diversas estrategias para hacer que el Juego de Estrellas sea más interesante, incluyendo la vinculación de la ventaja de casa en la Serie Mundial con el resultado del partido. Sin embargo, los resultados sugieren que estas medidas no han sido efectivas para revertir la tendencia descendente en la audiencia. La liga se enfrenta ahora al desafío de encontrar soluciones viables.
Los indicios de una disminución en la audiencia del Juego de Estrellas se hicieron evidentes antes del partido. El Derby de Jonrones, celebrado la noche anterior y transmitido por ESPN y ESPN2, atrajo una media de 6,11 millones de espectadores. Esta cifra representa la audiencia más baja del Derby de Jonrones en los últimos cinco años, y supone un descenso del 11 por ciento en comparación con el año anterior.
A pesar de los desafíos, la MLB puede encontrar cierto consuelo en el hecho de que el Juego de Estrellas sigue siendo el evento de estrellas más visto en comparación con otros deportes. Sin embargo, los datos generales indican la necesidad de que la MLB evalúe sus estrategias y encuentre nuevas formas de captar el interés del público.
En cuanto al partido en sí, el enfrentamiento en Seattle culminó con una victoria apretada de la Liga Nacional sobre la Liga Americana por marcador de 3×2. El batazo de dos carreras del receptor de los Colorado Rockies, el venezolano Elias Díaz, contra el cerrador de los Baltimore Orioles, Félix Bautista, en la octava entrada resultó ser el momento decisivo. Esta victoria puso fin a la racha de nueve victorias consecutivas de la Liga Americana y marcó el primer triunfo de la Liga Nacional en más de una década.
En resumen, el Juego de Estrellas de la MLB de 2023 ha registrado una disminución histórica en la audiencia por segundo año consecutivo, lo que plantea preocupaciones sobre el atractivo del evento a largo plazo. A pesar de los crecimientos en ciertos segmentos demográficos, las cifras generales de audiencia enfatizan la necesidad de que la MLB aborde el problema de la disminución de espectadores. El Juego de Estrellas, que solía ser el punto culminante de la emoción beisbolera, ahora requiere nuevas estrategias para recuperar el interés y la pasión de los aficionados.
Con información de The Athletic