«Lo que me molesta es que se ha usado mi nombre para ser el centro de un debate sobre la posibilidad de crear un equipo de béisbol que incluya cubanos que juegan en las Grandes Ligas, cuando en realidad nunca di ninguna entrevista, ni a esa periodista ni a nadie», escribió Pestano.
El enmascarado de Villa Clara hace referencia a la periodista Mayili Estévez, quien publicó las supuestas declaraciones bajo el título de «Ariel Pestano no cree en un Cuba unificado» en una entrega de Play Off, un órgano digital de carácter deportivo.
Una vez aparecido el artículo, la figura de Pestano comenzó a recibir fuego graneado -y también algunos aplausos- desde muchos lugares del mundo donde viven cubanos deseosos de ver a sus mejores peloteros unidos bajo los colores y las letras de su país.
«Llamarlos a una selección nos quitaría el valor [a los peloteros que se quedaron] que nosotros nos merecemos», habría comentado el hoy entrenador. «Una cosas así nos ofendería. Ellos se reirían de nosotros. ¿En qué sentido? En el monetario, en la profesionalidad. Porque aquí [en Cuba] hay muchos peloteros retirados que si hubieran tenido, tenido no, querido, serían estrellas de las Grandes Ligas y fueran millonarios, igual que todos ellos».
Sin embargo, Pestano recalcó en su misiva que al final todo se trataba de una tergiversación de unos comentarios privados que buscan dañar su imagen y convertirlo en el villano de historias inventadas.
«Me incomoda la incompetencia, la mentira y el oportunismo por sobre todas las cosas», escribió Pestano. «Exactamente, eso es lo que veo en el texto que se publicó. Quizás la periodista no tenía ni ideal del rumbo o la envergadura de lo que estaba publicando, llamémosle ingenuidad aunque a decir verdad no deja de ser oportunismo».
Teme Pestano que su respuesta no pueda contrarrestar la polvareda levantada por el artículo de Play Off, pero se ve obligado a responder ante «tamaña falta de respeto’’, aunque sería bueno connocer la versión de la periodista.
Si de algo ha servido todo esto, es para poner una vez más de relieve lo que piensa el aficionado cubano, no de Pestano -quien puede ser criticado o no, sin ataques personales- sino de la posibilidad de ver a los mejores entre los mejores en un Clásico.
Más ruidosa no ha podido ser esta polémica y ojalá no encuentre oídos sordos……dentro de cuatro años.