Cada vez que parece que la carrera de Yuli Gurriel está llegando a su fin, él mismo se encarga de, con su ofensiva oportuna y rendimiento integral, dejar claro que aún tiene material para aportar sobre el terreno. Si alguien lo duda, sería bueno que revisara su rendimiento este miércoles, durante la paliza de la filial de los Bravos de Atlanta 21×6 sobre la de los Mellizos de Minnesota, en Triple A.
Veamos su accionar en cada turno a la ofensiva de este desafío, donde fungió como primer madero y cuarto bate. Abrió fuego en la misma entrada inicial, cuando sacó la pelota del parque para firmar las dos primeras anotaciones de su equipo, una ventaja que nunca perderían.
Su cuadrangular llegó con un corredor en base, tuvo una velocidad de salida de 101.8 mph, en dirección hacia el jardín izquierdo y sucedió tras un envío a 80.2 mph del abridor rival, Caleb Boushley, con accionar esta misma campaña en la Gran Carpa.
So uh… That ball was demolished.
Yuli Gurriel absolutely crushes a two-run @SoFi home run to give us an early lead! pic.twitter.com/9VV1HOInkf
— Gwinnett Stripers (@GoStripers) July 3, 2024
En el tercer capítulo, “La Piña” recibió boleto y abrió el quinto inning sonando doble por la pradera izquierda, siendo empujado luego por otra conexión de dos bases, obra de Luke Waddell. En ese episodio la sucursal de Atlanta pisó cinco veces la goma y ello provocó que el cubano volviera a batear, poniendo fin a las angustias rivales con conexión capturada por el antesalista.
Para el inning de la suerte quedó reservado el segundo boleto conseguido por el hijo de Lourdes y Olga Lidia, para anotar posteriormente por sencillo de Luis Liberato.
Hasta ahí parecía todo excelente, pero el choque aún reservaba buenos momentos para el Yuli. En el octavo despachó imparable por la antesala, volviendo a anotar, esta vez por cuadrangular de Eli White.
Finalmente, en la novena entrada recibió su tercer pasaporte gratis de la cartelera, paso previo a que White repitiera la dosis jonronera, ahora con las bases llenas para acreditarse un grand slam.
En resumen, el otrora jugador de Sancti Spíritus e Industriales durante su paso por las Series Nacionales, se fue de 4-3, con cinco anotadas, dos remolcadas, un doble, un vuelacercas y tres boletos. Una vez más se quedó a un triple de completar el ciclo.
En sus tres últimos partidos ha bateado para .667 (12-8), con seis anotadas, dos dobles, igual cifra de bambinazos, cinco empujadas, tres boletos, un ponche y par de bases robadas.