La apertura del viernes fue una de las más cortas en la carrera de Sandy Alcántara.
Ya van cuatro salidas en la temporada y los Miami Marlins siguen sin encontrar al Sandy de antaño. En la derrota 7-2 ante los Phillies, Alcántara solo pudo completar dos entradas, en las que permitió seis carreras con cuatro hits (incluido un jonrón). Su efectividad se disparó a 7.27 y los Marlins cayeron a marca de 8-11, sumando su cuarta derrota consecutiva.
“Llegó a tener conteos de dos strikes, pero le costó finalizar a los bateadores”, dijo el mánager Clayton McCullough. “El conteo de lanzamientos subió muy rápido, y luego hubo envíos que simplemente no ejecutó bien. Muchos fouls, muchos conteos largos, y la dificultad para concretar los outs con dos strikes influyó en que no pudiera ir más lejos”.
Dicho con franqueza, fue una apertura preocupante para Alcántara. Conocido por inducir rodados con frecuencia —tiene un 50.7 % de roletazos de por vida y un 65.1 % en sus primeras tres salidas del 2025— ese número cayó a solo 33 % el viernes. Además, lanzó dos wild pitches.
La ofensiva de los Phillies no perdió tiempo. En la primera entrada, Bryce Harper desapareció la pelota con un cuadrangular de 418 pies al segundo nivel del jardín derecho, su quinto del año. Solo era la segunda vez en su carrera que le conectaba un jonrón a Alcántara.
En el segundo inning, Alcántara otorgó un boleto a Max Kepler, permitió sencillo de J.T. Realmuto y Alec Bohm impulsó la tercera carrera de los Phillies. Johan Rojas lo siguió con otro hit remolcador. Luego de lanzar su primer wild pitch, permitió la quinta carrera con un elevado de sacrificio de Bryson Stott, y la sexta llegó tras otro lanzamiento descontrolado.
Gran parte del daño llegó en conteos de 0-2, incluyendo el jonrón de Harper, la impulsada de Bohm y el segundo wild pitch. Alcántara lo atribuyó a la falta de control: “Intenté lanzar un cutter arriba y pegado, pero la dejé en el medio del plato, y fue pan comido para él”, dijo sobre el batazo de Harper.
Manager de los Marlins sobre Sandy Alcántara
“Si hay algo rescatable, es que sentimos que su stuff estaba bien esta noche”, comentó McCullough. “Fue más un tema de ejecución, de no poder terminar los turnos con dos strikes”.
Tras el partido, Alcántara no ocultó su molestia: “No estoy contento con lo que he hecho en las últimas salidas. Creo que es hora de volver al modo Sandy, salir cada cinco días y hacer mi trabajo”.
Anthony Veneziano, oriundo de Hackettstown, Nueva Jersey —a solo hora y media del Citizens Bank Park— relevó a Alcántara. Ante familiares y amigos, lanzó 2 ? entradas, permitiendo una carrera por jonrón de Kyle Schwarber y ponchando a dos.
Por su parte, el as de los Phillies, Zack Wheeler, tuvo su mejor salida del año: ponchó a 13 en siete entradas. Generó 20 swings fallidos, 11 de ellos con su recta de cuatro costuras. Cuatro de sus ponches llegaron con la sinker, tres de ellos mirando.
“Desde temprano sabíamos que su recta iba a ser efectiva”, dijo McCullough. “No pudimos quitarle esa herramienta. Tomó ventaja desde el inicio y luego encontró su ritmo, mezclando bien sus pitcheos”.
La única carrera que Wheeler permitió fue en el sexto inning, cuando Eric Wagaman conectó su segundo jonrón del año, un batazo de dos carreras a 427 pies que salió del bate a 105.9 mph. Tras un inicio lento, Wagaman ahora batea .260/.339/.440/.779 con dos jonrones y seis impulsadas.
Los Marlins buscarán recuperarse este sábado con Cal Quantrill en la lomita. Los Phillies enviarán a Taijuan Walker, quien ha comenzado bien la temporada. El primer lanzamiento está programado para la 1:05 p.m.