Por Claudio Rodríguez Otero
Nishinomiya, Japón. Especial – Hace poco tuvimos el placer de conversar en el Estadio Koshien de Nishinomiya con el lanzador cubano de los Dragones de Chunichi Raidel Martínez, quien compartió con nosotros la experiencia que ha vivido hasta ahora en la NPB.
No podría estar más feliz por la oportunidad de poder lanzar en Japón, que es algo que a todo pelotero cubano le gustaría hacer en este momento, ni tampoco más agradecido por todo lo que ha aprendido en el poco tiempo que lleva trabajando en el país.
Sus compañeros de equipo le viven dando consejos, el apoyo que recibe de los fanáticos es inigualable y, de tener la oportunidad, le gustaría continuar jugando en la liga y viviendo en el país por muchos años más.
Esta es ya tu segunda temporada con el equipo mayor y tu tercera desde que llegaste a Japón. ¿Qué tal ha sido hasta ahora la experiencia?
Buenísima. Todo pelotero cubano quiere ahora venir a Japón y jugar en la máxima categoría de esta liga, así que estoy muy feliz por estar aquí. Cada vez que me dan la oportunidad de jugar con el equipo grande, yo siempre salgo a hacer lo que yo sé hacer, que es pitchear, y dar lo mejor de mí cada vez que me subo a la lomita.
¿Qué has aprendido aquí que no habías aprendido jugando en Cuba?
Bueno, aquí he aprendido muchas cosas que me han ayudado bastante. Por ejemplo, he perfeccionado la recta de dedos separados, que ya domino bastante bien. En el poco tiempo que he estado trabajando aquí he aprendido muchas cosas, así que le doy las gracias a Japón por eso.
No sólo estás jugando en Japón, sino que además lo estás haciendo en compañía de compatriotas como Omar Linares, Dayán Viciedo y, el año pasado, Onelki García. ¿Qué tal ha sido poder compartir con ellos?
Ha sido algo fantástico. Cada vez que me daban la oportunidad de jugar con el equipo grande ellos hablaban mucho conmigo y me daban consejos, sobre todo García, porque siempre estábamos trabajando juntos en el bullpen. Viciedo también hablaba mucho conmigo. Me recomendaba que metiera mano y que diera lo mejor de mí sobre el montículo.
¿Qué tal te han recibido tus compañeros y los fanáticos del equipo?
Muy bien. Yo me las llevo bien con todos mis compañeros, somos como una familia. Siempre estamos hablando y echando broma. Con respecto a los fanáticos, pues son lo máximo. Siempre me reciben muy bien cada vez que salgo a lanzar y nunca dejan de apoyarme.
¿Cuánto tiempo más te gustaría quedarte jugando en Japón?
Bueno, el tiempo que ellos me dejen. Cada vez que me den la oportunidad de lanzar, siempre lo haré con gusto, así que planeo quedarme aquí hasta que ellos me digan que ya está bueno.
Dejando al béisbol de un lado, ¿qué te parece Japón como país?
Increíble. Este es un país súper desarrollado donde se vive muy bien y la cultura que tiene la gente es impecable. Aquí todo es buenísimo.
https://m.youtube.com/watch?v=Vkw_UBa5t4o