Por Ventura De Jesús
Para Alfredo Despaigne, pelotero probado ya en otras lides, conceder a Cuba la membresía plena en la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC) sería algo muy conveniente y una condición merecida.
Es de las buenas cosas que le podría pasar al béisbol cubano, que trabaja por elevar su calidad, reconoció el recio bateador, aclamado en los últimos años en Japón, donde ha cumplido contrato con el Fukuoka SoftBank Hawks, en el primer nivel de la pelota profesional.
En fecha reciente, el presidente de la Federación Cubana de Béisbol (FCB), Higinio Vélez, notificó en rueda de prensa sobre la solicitud a la cbpc de un cambio de estatus para nuestro país (de invitado a miembro pleno), petición reiterada en conversaciones con esa organización a lo largo de varios años.
Explicó el directivo que aprobar esa justa demanda es factible, luego de alcanzar el acuerdo con las Grandes Ligas de Estados Unidos, el pasado 19 de diciembre.
Una Serie del Caribe en Cuba, un país que conoce y ama tanto la pelota, se convertiría en un bonito espectáculo y en un impulso al desarrollo de esa disciplina, dijo Despaigne.
Ponderó, además, la calidad de la pelota profesional en un circuito caribeño donde se dan cita lanzadores experimentados, y que al propio tiempo deviene oportunidad para los peloteros más jóvenes.
La Serie del Caribe es una oportunidad para mostrar a los jugadores con mayor futuro en toda el área. Para los cubanos es también una excelente ocasión de probar su talento, de manera que muchos ya están listos para jugar en otras ligas, reconoció.
Despaigne celebra su elección para representar a los Leñadores de Cuba en una justa a la que acude por sexta ocasión consecutiva y en la cual no ha podido desplegar su virtuosismo como bateador.
En estas cinco ediciones solo totaliza un average inferior a 200, con 16 inatrapables en 81 turnos al bate, dos jonrones y siete carreras impulsadas.
«En realidad, no he tenido series buenas, aunque siempre hice el mayor esfuerzo y traté de aportar el máximo. Creo que las cosas no han salido, así es la pelota», sostuvo sin ánimo de justificar su bajo rendimiento en esa justa.
Manifestó que luego de terminar una serie tan larga, como es la de Japón, y con un descanso de por medio, a veces es difícil volver a retomar la forma para un evento de esa índole, que exige una preparación adecuada para llegar a tope.
«En una serie de cuatro, cinco o seis partidos, el que comienza bien termina bien, y a la inversa», razonó. «Lo importante es mantener la mente positiva para alcanzar un alto rendimiento y que este año no se nos escape el banderín», comentó.
Todo el mundo da por sentado que con sus batazos pueda marcar la diferencia en más de una ocasión. De solo pararse en el plato infunde respeto. Nació para hacer en la pelota lo que es exclusivo de unos pocos: conectar jonrones con relativa facilidad.