Tomado de BéisbolJaponés.com
Alfredo Despaigne. El toletero cubano de los Marinos de Lotte registró su mejor campaña desde que llegó al circuito nipón en 2014. Quedó tercero en anotadas (81) y quinto en empujadas (92) y porcentaje de slugging (.480) en la Liga del Pacífico (todas nuevas marcas personales) y además guió a su equipo a la postemporada, fase en la que deslumbró con el bate. Estuvo cerca de ser electo para participar en la Serie de las Estrellas, pero al final no pudo reunir los votos suficientes para hacerlo. Lotte hizo todo lo posible por renovarlo, pero su oferta de 10,2 millones por 3 años no fue aceptada por la Federación Cubana de Béisbol. Se espera ahora que el antillano firme con los Halcones de SoftBank.
Dayán Viciedo. El inicialista cubano de los Dragones de Chunichi tuvo un excelente debut en la NPB este año al irse para la calle en los 3 primeros juegos de la temporada y capturar el premio al Jugador Más Valioso del mes de abril en la Liga Central. Lamentablemente, una lesión casi no le permitió jugar durante la recta final del calendario, pero a pesar de ello bateó para .274, con 22 jonrones, 68 empujadas y un porcentaje de slugging de .486. Debido a ello, el club decidió renovarlo por una temporada más.
Raúl Valdés. El cubano de los Dragones de Chunichi completó otra sólida temporada para el conjunto de Nagoya, si bien una lesión retrasó su debut este año. Sin embargo, logró realizar 20 aperturas, en las que dejó una marca de 6-7, con 103 ponches y una efectividad de 3.51. A pesar de sus 39 años, el club ya anunció que le renovará su contrato para 2017.
Félix Pérez. El cubano de las Águilas de Rakuten, que fue contratado como un refuerzo de emergencia a principios de julio, tuvo un debut de ensueño en el béisbol japonés: se fue para la calle una vez y remolcó 2 carreras en cada uno de sus dos primeros juegos con el equipo. Lamentablemente, su producción comenzó a decaer a partir de ese momento y eso, sumado a la llegada del dominicano Carlos Peguero, lo relegó al conjunto filial. Sus números finales no fueron malos (bateó para .239, con 5 jonrones y 15 empujadas en 24 juegos), pero a pesar de ello el club decidió dejarlo en libertad a finales de año. Debido a su juventud, es posible que pueda regresar a la NPB en el futuro, pero en este momento no es seguro.
Bárbaro Cañizares. El cubano de los Halcones de SoftBank, tal como ocurrió en las dos temporadas anteriores, sólo disputó unos pocos partidos con el equipo mayor. En el pasado, la excusa fue el exceso de extranjeros en el club, pero en esta ocasión había un cupo disponible para subirlo al primer equipo y a pesar de eso le negaron la confianza. Como consecuencia, sólo jugó 16 partidos, en los que bateó para .179, con 3 empujadas y ningún jonrón. La gerencia decidió dejarlo en libertad a finales de año y lo más probable es que nunca más regrese a la NPB.
Leslie Anderson. El cubano de los Gigantes de Yomiuri se vio limitado a sólo 3 juegos este año debido a una lesión y al exceso de extranjeros en el club. En ellos bateó para .250, con una empujada y ningún jonrón. El club decidió dejarlo en libertad a finales de año, por lo que es muy poco probable que regrese a la NPB en el futuro.
Héctor Mendoza. El cubano de los Gigantes de Yomiuri, quien fue firmado en 2014 como una apuesta a futuro, volvió a decepcionar este año al ver acción en apenas 3 juegos como relevista y registrar una efectividad de 11.25. Esta vez, el club sí decidió dejarlo en libertad y parece muy poco probable que otro equipo le ofrezca la oportunidad de regresar a la NPB.
José Adolis García. El cubano de los Gigantes de Yomiuri, quien llegó a Japón como el mejor prospecto del béisbol de su país, no pudo cumplir con las expectativas que se tenían de él. Sólo tomó 7 turnos en cuatro partidos con el conjunto mayor de la organización y no pudo sumar ni un solo hit, por lo que su promedio final fue de .000. El club lo dejó en libertad a mediados de agosto diciendo que no le veía potencial y éste decidió desertar cuando hizo escala en París en el camino de regreso a su país.
