Por Anthony DiComo
PORT ST. LUCIE, Florida — Yoenis Céspedes no sabe si el momento llegará en julio, agosto o septiembre. Pero el cañonero cubano está convencido de que vestirá el uniforme de los Mets en algún momento de la temporada 2019.
Casi cuatro meses después de la segunda de dos cirugías para removerle calcificaciones y espolones óseos a ambos talones, Céspedes espera reanudar sus actividades de béisbol la próxima semana, pero no sabe cuándo recibirá el visto bueno de los médicos para batear, atrapar elevados o correr.
«Ha sido bien frustrante para mí hasta ahora, porque me encanta el béisbol y me he ausentado del juego ya por varios meses», dijo Céspedes. «No sé qué hacer. Estoy bien aburrido. Quiero empezar la temporada con el equipo, pero en estos momentos no se puede».
Céspedes fue operado en agosto y nuevamente en octubre y proyectó que demoraría entre ocho y 10 meses para volver a la acción.
No hay garantía de que cuando regrese, Céspedes vaya a ser un toletero capaz de empalmar 30 jonrones desde la parte gruesa del orden ofensivo. Pero el oriundo de Granma, quien tiene 33 años, insiste en que se operó con el fin de recuperar la forma.
«Cuando regrese, tengo previsto estar al 100 por ciento como lo estuve en el 2015», dijo Céspedes.
En aquel entonces, Céspedes impulsó a un equipo de los Mets que lo adquirió en un canje con los Tigres en julio y llegó hasta la Serie Mundial. Ese invierno, los Mets renovaron con Céspedes y luego le dieron un contrato de cuatro años y US$110 millones.
En dos temporadas desde que firmó dicho convenio, Céspedes ha disputado apenas 119 juegos por lesiones. En ese tramo, su promedio fue de .282 con 26 jonrones y un OPS de .869.