Por Jorge Ebro
El regreso de Yoenis Céspedes sigue siendo un enigma. Ni los propios Mets se atreven a especular sobre una posible fecha de retorno para el jardinero cubano, pero al menos una movida del club indica a las claras que todavía falta tiempo para verlo tomar un bate en Grandes Ligas.
Céspedes, quien fue operado en el invierno de ambos talones, fue transferido a la lista de lesionados de 60 días y su puesto en el roster de 40 peloteros será adjudicado al relevista Wilmer Font, quien llega de los Rays de Tampa Bay.
Este movimiento interno no significa que Céspedes se vaya a perder el resto de la temporada. De hecho, no se tendrá una idea clara del potencial regreso del cubano hasta que no comience su trabajo de rehabilitación en la granja de Nueva York.
A Céspedes se le ha visto lanzando en los jardines y trabajando en las cajas de bateo, pero todavía no posee el permiso para iniciar un programa de carreras y probar la recuperación de sus talones.
La lesión en los talones limitó a Céspedes a jugar apenas 38 encuentros en la pasada temporada e hizo que su producción ofensiva descendiera a .262, con nueve cuadrangulares y 29 impulsadas.
Las dos operaciones en los talones fue el último retroceso de Céspedes, quien había perdido tiempo de juego en el 2018 debido a problemas en la cadera, quizá debido a sus dificultades para caminar.
De hecho, Céspedes había perdido considerable tiempo de juego en las pasadas dos temporadas, lo cual le llevó a modificar sus sistemas de entrenamiento y preparación, recurriendo incluso al yoga y bajando las cargas de pesas.
Después de ocho temporadas con Granma, Céspedes era una de las estrellas de la selección nacional cubana, cuando salió vía marítima rumbo a la República Dominicana en el 2011 antes de firmar un contrato en febrero del 2012 por cuatro temporadas y $36 millones con los Atléticos de Oakland.
Dos veces ganador del Derby de Jonrones, Céspedes tuvo estancias en Boston y Detroit antes de establecerse en Nueva York, donde firmó otro pacto de tres contiendas y $75 millones.
En siete temporadas de Mayores, el cubano batea para .274 con 163 cuadrangulares y 524 impulsadas, además de un OPS de .821.