Por Claudio Rodríguez Otero
Nishinomiya, Japón. Especial – Recientemente tuvimos la oportunidad de entrevistar en el Estadio Koshien de Nishinomiya al toletero cubano de los Dragones de Chunichi Dayán Viciedo, quien compartió con nosotros su experiencia hasta ahora en la NPB.
No pudo quedar más contento con el éxito que tuvo la temporada pasada y explica que la clave de todo fue su consistencia sobre el plato y especialmente su swing, que prácticamente no tuvo defectos durante todo el año.
Ver al resto de los latinos del club triunfar junto a él fue algo muy especial y jamás se imaginó quedarse por tanto tiempo en Japón, pero en realidad no le importa porque ya está adaptado y se siente muy cómodo jugando y viviendo en el país.
Háblanos primero de esa gran temporada que tuviste el año pasado. Ganaste el título de bateo de la Liga Central, lideraste el circuito en hits y ganaste el premio al Jugador Más Valioso del mes de agosto. ¿Qué tal fue vivir esa experiencia?
Fue algo muy bueno. Tuve un gran 2018, todo me salió bien ese año. Yo creo que lo fundamental fue la consistencia que tuve durante todo el campeonato y, sobre todo, mi swing, que estuvo muy bueno. Además, fue muy emocionante ganar mi primer título de bateo. Todo eso fue el fruto de la preparación que tuve, del trabajo que hice en Miami antes de venirme y también del que hice durante los entrenamientos primaverales en Okinawa. De verdad que el 2018 fue un tremendo año para mí.
¿Qué hiciste para llevar tu swing a ese nivel tan alto? ¿Qué cambiaste en comparación a años anteriores?
Yo creo que la clave fue encontrar la manera de estar siempre por dentro de la bola. Yo a veces me inclino mucho hacia adelante, pero el año pasado logré mantener siempre una buena posición para batear y fui muy consistente con mi swing, que lo reservé sólo para buenos pitcheos. Otra cosa importante fue hacer los ajustes necesarios en cada turno y encontrar la manera de recuperarme cuando estaba detrás en la cuenta. Me enfonqué en dejar pasar los lanzamientos malos y hacerle swing sólo a los strikes.
¿Qué te dijeron tus compañeros de equipo y tu manager acerca del gran año que tuviste?
Me felicitaron, por supuesto. Todos estaban muy contentos con mi trabajo. Lamentablemente, yo me lesioné en 2017 y no pude ayudar mucho al equipo, pero durante el invierno trabajé duro en Miami y cuando llegué aquí a los entrenamientos primaverales ya me sentía bien y comencé a batear bien. Yo les di las gracias a todos, especialmente a los que me ayudaron a registrar esos números. Fue un año muy emocionante para mí.
Otro éxito importante que tuviste el año pasado fue precisamente el haber podido jugar la temporada completa, porque en las anteriores siempre te habías lesionando.
Así es, el año pasado fue la primera vez que jugué la temporada completa. Lamentablemente, uno a veces se lesiona, pero esas son cosas que pasan y que uno no puede controlar. Yo igual estaba preocupado, porque me había preparado bien y nunca había podido jugar el año completo, pero afortunadamente el año pasado sí lo logre y el resultado no ha podido ser más positivo.
Ese éxito te trajo además una gran recompensa: la renovación de tu contrato con el equipo, no sólo por una, sino por 3 campañas más.
Así es. Cada vez que uno trabaja bien siempre recibe su recompensa. Uno siempre tiene que estar enfocado en el presente, sobre todo aquí en Japón, donde uno no puede estar pensado en el mañana. Aquí hay que resolver en el día a día y siempre tener una mente positiva, porque yo creo que eso es lo que más te ayuda a salir de los malos momentos. Si te fuiste de 4-0 un día, pues no importa, mañana será otro día. Lo más fundamental en este juego es la motivación que uno se da a uno mismo. Hay que estar siempre tranquilo y jugar tu pelota, porque cuando uno trabaja fuerte las cosas siempre salen bien.
El equipo viene de 2 temporadas en las que terminó penúltimo en la clasificación. Sin embargo, parece estar mucho mejor este año. ¿Cómo lo ves?
Yo creo que estamos bien. Este es un equipo muy joven y seguimos mejorando cada año y ese es el objetivo. La idea no es ir en retroceso, sino ir avanzando cada año y yo creo que lo estamos logrando. Todavía no estamos obteniendo los resultados que nosotros queremos, pero sin duda vamos mejorando, en especial los muchachos jóvenes, que se ve que tienen ganas de triunfar. En general, creo que estamos bien tanto en el pitcheo como en el bateo. Todavía es temprano en la temporada, pero ahí estamos, batallando. Lo fundamental es mantenernos siempre cerca de los otros equipos y no dejar que se nos escapen, para así tener chance de clasificar a la postemporada, que es lo que todos queremos.
El 2018 no sólo fue un gran año para tí, sino también para todos los latinos del equipo, a los que también les fue bien. Onelki García, Zoilo Almonte, Steven Moya y Joely Rodríguez debutaron todos el año pasado y a todos les fue bien.
Así es. Yo me sentí muy contento con eso. El poder ver a todos los latinos del equipo triunfando fue algo muy bueno. Lamentablemente, Moya sufrió una lesión, pero en general todos hicimos el trabajo, todos tuvimos una buena temporada. El heho de que todos pudimos ayudar al equipo fue algo muy especial. Al final, para eso es que estamos aquí y me sentí muy contento de que todos lo hayamos podido hacer.
Una vez que termines tu actual contrato ya habrás pasado 6 temporadas en Japón. ¿Te imaginaste alguna vez que te ibas a quedar tanto tiempo en esta liga?
No, nunca me imaginé eso. El primer año que vine para acá, después de haber jugado en los Estados Unidos en el 2015, fue como de prueba. Me pude adaptar rápido, gracias a Dios, pero igual este era un mundo completamente ajeno para mí. Sin embargo, poco a poco me seguí adaptando y ahora me siento muy bien por aquí. Me siento cómodo y tengo una buena relación con todos los muchachos. No sé que pasará después de que se acabe mi contrato, pero hasta ahora la experiencia en Japón ha sido muy buena, no sólo en el béisbol, sino en general.