Por: Javier González
Culmina la temporada 2018 del mejor béisbol del mundo y en ella, dos cubanoamericano llevaron la voz cantante en sus respectivas Ligas.
Los Medias Rojas de Boston, equipo que a la postre resultó ganador de dicho torneo, observó como su contratación estrella de la temporada baja, Julio Daniel Martínez, se convertía en el bateador más temible del juego, despejando todas y cada una de las dudas que surgieron al momento de desembolsillar 110 millones para hacerse de sus servicios.
El natural de Miami, además de adjudicarse el primer anillo de Serie Mundial de su carrera, también terminó llevando a sus vitrinas, no uno, sino dos Bates de Plata, primer individuo en hacerlo en la historia de este deporte. Martínez ganó su primer premio en su posición original, la de bateador designado, donde no tenía ni siquiera rival que le peleara su galardón. Sin embargo los patrocinadores, la empresa Hillerich & Bradsby, fabricante de los bates Louisville Slugger, decidieron también entregarle el premio en la posición de jardinero izquierdo, a pesar de que sólo jugó 32 partidos (280.0 entradas a la defensa) en dicho sitio.
Pero más allá de ganar ambos Bates de Plata, por cierto, su segundo y tercero de por vida (recordar que ganó este premio por primera vez en 2015 mientras jugaba para los Tigres de Detroit), Martínez también ganó el premio Hank Aaron al jugador más ofensivo de su Liga, el primer galardón de esta índole que atrapa en su aún joven carrera.
El hijo de cubanos además, durante el torneo que acaba de culminar, terminó en el Top Three de su circuito en:
Promedio de bateo: segundo con 330
OBP: tercero con 402
Slugging %: segundo con 629
OPS: tercero con 1,031
Carreras empujadas: líder con 130
Carreras anotadas: tercero con 111
Hits conectados: segundo con 188
Cuadrangulares: segundo con 43
Todo eso sin aparecer ni siquiera dentro de los 20 primeros peloteros que más turnos al bate consumieron.
Martínez además asistió a su segundo Juego de Estrellas, primero como titular, una condecoración recibida gracias al voto popular.
Como dato a resaltar, Martínez rompió el récord de cuadrangulares para un pelotero recién llegado a la organización de los Medias Rojas, dejando atrás la marca de 42 de Dick Stuart, fijada en 1963.
Lamentable e injustamente, Martínez no fue seleccionado como finalista al MVP de la Americana, una decisión que trajo consigo una gran polémica y una ola de comentarios de rechazo enormes, propiciados incluso por propios peloteros y renombrados periodistas del negocio.
En el viejo circuito otro de raíces caribeñas hizo lo suyo, lo cual ya ha perdido hasta el matiz de ser noticia de tanto que lo ha repetido año tras año. Obviamente me refiero a Nolan Arenado.
El estelar tercera base de los Rockies de Colorado ayudó nuevamente a clasificar a su equipo a la postemporada, siendo la primera vez en 26 años de existencia de la organización que asisten a postemporada en años corridos.
Nolan en 2018 atrapó su sexto Guante de Oro en sus primeros seis años como ligamayorista, uniéndose a Mike Schmidt como los únicos antesalistas de la Liga Nacional en cosechar 6 Gold Glove de manera consecutiva (Aclarar: Schmidt no los logró en sus primeros 6 años). También conquistó su segundo Guante de Platino, de igual manera en años corridos. Nolan además se alzó con su cuarto Bate de Plata en los últimos cuatro años, uniéndose en esta categoría también al Inmortal Mike Schmidt como los únicos defensores de la esquina caliente con 4 o más Silver Slugger de manera seguida. Todo esto después de conectar más de 35 cuadrangulares, empujar más de 110 carreras, obtener más de 550 de promedio de Slugging y más de 900 de OPS en todas y cada una de las temporadas en el período comprendido 2015-2018.
La temporada que acaba de concluir además, sirvió para que los aficionados al béisbol por fin vieran al hijo del cubano Fernando Arenado aparecer entre los finalistas al MVP, luego de que injustamente se le privara de tal reconocimiento en las tres campañas anteriores.
La edición 2018 del Big Show fue testigo de cómo el cubanoamericano se situaba en el Top Five en el viejo circuito en:
Cuadrangulares: líder con 38
Carreras empujadas: segundo con 110
Carreras anotadas: quinto con 104
Promedio de slugging: tercero con 561
OPS: segundo con 935
Como dato a resaltar, Arenado atrapó su tercer liderato en cuadrangulares en los últimos cuatro años en la Nacional.
Nolan, por cuarto año en línea, pudo asistir al Juego de Estrellas, como titular indiscutible en todos y cada uno de ellos, gracias al voto de los fanáticos.
¿Te imaginas un equipo nacional cubano con ellos dos en el medio de la alineación?