Por Boris Luis Cabrera
Solo le restan seis partidos al calendario regular para terminar la fase clasificatoria de esta edición de la Serie Nacional de Béisbol y aún hay humo en la tabla de posiciones después de tantas batallas en el terreno de juego.
La paridad entre los equipos participantes, el propio sistema de competencia, la rapidez con que se consumen 45 juegos, y el significativo decrecimiento de las emigraciones, son algunos puntos que han aumentado la competitividad y el interés de los aficionados que han apoyado, con su asistencia a los estadios, a nuestro deporte más querido.
La realización de un campeonato previo con los muchachos menores de 23 años, a pesar de múltiples dificultades de carácter logístico y de dudosas calidades individuales, ha servido para foguear y preparar a muchos de ellos (hambrientos de horas de vuelo sobre los diamantes) que ahora mismo están dando su importante aporte para las aspiraciones de sus conjuntos.
Todos estos factores, han ido salvando, poco a poco, el mayor espectáculo de nosotros los cubanos. Los problemas que nos atacan -demonios externos e internos- no han podido detener esa coquilla que nos recorre el cuerpo cuando sentimos el sonido hueco del madero chocando con la pelota ni hacer mella en las emociones descontroladas que nos provocan nuestros equipos favoritos cuando logran una victoria.
No basta el increíble descontrol de algunos lanzadores, los inexplicables errores al campo, el abuso de la base por bolas intencional ni del toque de bola. Nada pueden hacer los incontables fallos en el pensamiento técnico-táctico, ni jovencitos quemando etapas, mucho menos directores que se ríen de la sabermetría, ni escaseces, vicisitudes, y mimetismos.
Nuestro deporte nacional está vivo, se alza sobre las críticas y sigue llenando vacíos y coloreando almas, para beneplácito de todos nosotros. Es nuestra naturaleza, parte intangible de nuestra cultura, es un gen propio que no han podido extirpar científicos con fórmulas futboleras, pseudointelectuales que hacen tesis de decadencias, ni profetas con bolas de cristal.
Solo seis partidos van restando. En el horizonte épicas batallas de comodines, refuerzos, y otros 45 encuentros con las calidades concentradas. Esto empieza ahora. Que viva la pasión. Nos vemos en el estadio.
Líderes de average en la Serie Nacional de Béisbol
BATEO | AVERAGE OFENSIVO |
Jorge E. Aloma (ART) |
420 |
Pedro León (MAY)
|
412 |
Maikel Cáceres (HOL)
|
412 |
Edilse Silva (SCU)
|
408 |
Jorge Johnson (LTU)
|
396 |
Anotadas:
ANOTADAS | |
Dayron Blanco (ART) | 40
|
Maikel Caceres (HOL)
|
39 |
Yuniesky Larduet (LTU)
|
37 |
Yordanis Samon (IND)
|
35 |
Stayler Hernández (IND)
|
32 |
Jonrones:
JONRONES | |
Pedro León (MAY)
|
13 |
Yosvany Alarcón (LTU)
|
10 |
Stayler Hernández (IND)
|
9 |
Maikel Cáceres (HOL)
|
8 |
Alfredo Fádraga (CAV) | 7 |
Impulsadas:
IMPULSADAS | |
Stayler Hernández (IND)
|
43 |
Yosvany Alarcón (LTU)
|
36 |
Pedro León (MAY)
|
33 |
Dayan Gracia (ART)
|
33 |
Maikel Cáceres (HOL)
|
33 |
Slugging:
SLUGGIN | |
Pedro León (MAY)
|
853 |
Maikel Cáceres (HOL)
|
688 |
Lázaro Hernández (ART)
|
677 |
Yosvany Alarcón (LTU)
|
667 |
Jorge E. Aloma (ART)
|
664 |
Promedio de carreras limpias
PICHEO | P.C.L |
Alberto Bicet (SCU)
|
1.31 |
Vladimir Garcia (CAV)
|
1.72 |
Frank Luis Medina (PRI)
|
1.74 |
Joel Mojena (GRA)
|
1.84 |
Yosbel Zuleta (VCL)
|
1.91 |
Juegos ganados:
GANADOS | |
Alberto Bicet (SCU)
|
7 |
Wilson Paredes (HOL)
|
7 |
Salvados:
SALVADOS | |
Alyanser Alvarez (MAY)
|
8 |
Leomil González (CAV)
|
7 |
Yosbel Alarcón (LTU)
|
7 |
Miguel A. Lastra (IJV)
|
7 |
Yaniesky Duardo (SSP)
|
7 |
Ponches:
PONCHES | |
Yoanni Yera (MTZ)
|
61 |
Vladimir Garcia (CAV)
|
44 |
Yariel Rodriguez (CAM)
|
43 |
Yadian Martínez (MAY)
|
37 |
Yosbel Zuleta (VCL)
|
36 |