POR JORGE EBRO
Para muchos fue una sorpresa que el cubanoamericano Peter O’Brien quedara fuera del equipo al final de la primavera. Aunque los Marlins han conectado cinco cuadrangulares en cuatro juegos, el poder no es el fuerte de este conjunto.
Sin embargo, el chico de Hialeah no había jugado apenas un juego de Liga Menor cuando recibió la indicación de que no perdiera tiempo para regresar a Miami, luego de que Garrett Cooper se lesionara la pantorrilla izquierda.
“Cuando me dijeron que no iba a hacer el equipo en la primavera no me desanimé’’, comentó O’Brien. “Me quedé en Júpiter entrenando con más fuerzas todavía, pensando que en algún momento vendría otra oportunidad’’.
Lo que no sabía el pelotero de 28 años es que esa oportunidad vendría en la misma primera subserie de la temporada, luego de que Cooper se lesionara el viernes, recordando al fantasma del 2018, cuando el inicialista jugó apenas 14 encuentros luego de fracturarse la muñeca izquierda.
Se espera que Cooper pierda al menos entre cuatro y seis semanas, pero existen duda sobre su capacidad de mantenerse saludable de manera constante y esto podría abrir más opciones para O’Brien.
“En la pelota uno nunca sabe, siempre aparecen chances como esta, lo importante es estar listo cuando te llamen’’, agregó el pelotero que el lunes estuvo en la pradera derecha. “Ahora me toca a mí hacer mi trabajo, tener buenos turnos y ayudar al equipo a ganar’’.
Cuando Cooper conquistó ese puesto por encima de O’Brien en el spring training, el manager Don Mattingly calificó la decisión como la más difícil a tomar en esas cuatro semanas en Jupiter.
Ciertamente, Cooper bateó para .395 en la primavera y O’Brien lo hizo para .220, pero el cubanoamericano cerró el mes de marzo con una línea ofensiva de .300/.450/.533, un cuadrangular y 11 impulsadas.
Ahora, su O’Brien pudiera seguir en abril lo que inició en marzo sería muy bueno para Miami.
“Obviamente, el poder es parte de mi juego, pero mi intención es maximizar cada turno en el contacto’’, explicó O’Brien, de mamá cubano y padre estadounidense. “Esas cosas van a suceder solas’’.