La fase de clasificación de la Serie del Caribe ya es historia, pero, la última jornada, nos dejó muchas emociones, incluso, un acontecimiento que será recordado por varias generaciones. También, es importante destacar que se rompió la mayor asistencia general para una Serie del Caribe.
En el primer choque del día, Curazao consiguió su segunda blanqueada en la historia de la competencia, venciendo 2-0 a Puerto Rico. De esa manera, también llegaron a una semifinal por primera ocasión.
El derecho, Juan Carlos Sulbarán, lanzó cinco innings en blanco para llevarse la victoria. Después, Wendell Floranus, Shea Spitzbarth y Anthony Herrera cubrieron tres entradas para cubrir la ruta completa.
Las dos carreras de los curazaleños fueron gracias a dos flys de sacrificios. El primero de Juremi Profar y el segundo de Didi Gregorius. Los bates de Puerto Rico nunca despertaron y, para colmo, tuvieron el OPS (.435) más bajo del torneo con corredores en posición anotadora
En el segundo choque, Panamá siguió sorprendiendo al mundo beisbolero y derrotó 3-1 a República Dominicana. El cubano, Jorge Martínez, lanzó cinco entradas de tres hits y una carrera, al mismo tiempo, ponchó a siete bateadores y con esa cifra igualó su mayor cantidad en un juego de la Serie del Caribe (6/2/2015 contra el propio Dominicana).
Los panameños Ernesto Silva y Davis Romero, se combinaron para lanzar las nueve entradas admitiendo una sola vuelta al cuadro. Por la ofensiva de los canaleros, se destacaron Jhonny Santos y Christian Betancourt, ambos, se volaron la barda.
El matancero, Yadiel Hernández, fue uno de los mejores bateadores de la ofensiva dominicana, conectó dos imparables en tres veces al bate y también negoció una base por bolas. Dawel Lugo y Robinson Canó, concluyeron la jornada con par de inatrapables.
Lo mejor estaba por venir, en el tercer choque de la jornada el lanzador de Venezuela, Ángel Padrón, lanzó el segundo juego sin hit ni carrera en la historia de la Serie del Caribe. El primero se había logrado el 21/2/1952 cuando Tomas Fine se lo propinó a Venezuela. Tuvieron que pasar 71 años, 11 meses y 15 días para que se diera el segundo.
Padrón le otorgó un boleto a Raudy Read en la octava entrada y esa fue la única cosa que lo alejaría de la perfección, aún así, es asombroso que de las 22 bolas que le pusieron en juego, solo dos, fueron golpes fuertes (conexiones de al menos 95 millas).
La ofensiva de Venezuela también sobresalió en la victoria (9-0) sobre Nicaragua. Yasiel Puig, logró batear de 4-2 con un doble y par de carreras anotadas. Odubel Herrera, Alcides Escobar y Leonardo Regginato, sumaron tres hits.
Hoy, la primera semifinal será entre Dominicana y Panamá a las 3 de la tarde. A las 8, jugarán Curazao y Venezuela en la segunda semifinal. Los dos encuentros serán con el techo abierto del Loan Depot Park.