El pinareño Randy Arozarena llegó este sábado a 27 partidos consecutivos embasándose al menos en una oportunidad, en la victoria de los Marineros de Seattle sobre los Rangers de Texas en el Globe Life Field. En el desafío conectó múltiples imparables, pese a no incidir directamente en el marcador de su equipo.
Arozarena pegó dos indiscutibles en cuatro visitas oficiales al cajón de bateo. El encuentro finalizó con victoria de los Marineros, dos carreras por una, sobre los Rangers, lo que significó la vigésima victoria de Seattle (con 12 derrotas), para ubicarse en el primer puesto de la División Oeste de la Liga Americana.
Randy defendió, como es habitual, el jardín derecho y se desempeñó como cuarto bate en la alineación. Arozarena debe mejorar su productividad para ayudar a los Marineros a alcanzar la postemporada, un objetivo que pueden cumplir este año si logran mantener el ritmo que llevan. Otro que debe mejorar es el dominicano Julio Rodríguez, quien apenas está promediando .209 y es uno de los jugadores clave en la ofensiva del equipo que vio debutar en Grandes Ligas al japonés Ichiro Suzuki.
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La racha de Randy Arozarena
Su racha comenzó el 31 de marzo, cuando pegó un jonrón y un doble frente a los Tigres de Detroit, iniciando así una seguidilla de 27 juegos consecutivos embasándose, como mencionamos al inicio de esta nota. Pero más allá de esa racha, lo más impresionante es que, en lo que va de temporada —para él, 31 juegos de los 32 que ha disputado su equipo—, solo en uno no se ha embasado.
Ese día fue el 30 de marzo, cuando se fue en blanco en tres turnos frente a los Atléticos. Hasta el momento, Randy ha pegado 25 indiscutibles en 113 turnos al bate, ha empujado 18 carreras, ha anotado en 16 ocasiones y presenta un promedio de bateo de .221. Su porcentaje de embasado es de .367, el slugging de .416 y el OPS de .783.