Por Alejandro Aldama
Primeramente quisiera reconocer a todos los miembros del Grupo Independiente de Investigación del Béisbol por el muy buen trabajo de estudio de contrario que se realizó para el partido contra Tampa (de manera especial a Yasser Aguiar y Alfredo Rodríguez, que hicieron un trabajo de análisis pitch by pitch y edición de videos de los jugadores de Tampa), lo cual redundó en una estrategia de pitcheo específica para cada bateador que contribuyó a dejar a los Tampa Bay Rays en solo 5 hits.
Anteriormente habíamos comentado que la ofensiva de Tampa contaba con varios jugadores de fuerza y algunos jugadores rápidos, que de manera general conectaban muy bien la recta y tenían deficiencias con los lanzamientos de rompimiento.
De los 5 hits que conectó Tampa, 4 fueron sobre lanzamientos en rectas, incluyendo el jonrón.
En el segundo inning, después de 2 outs, Kevin Kiermaier conecta doble al jardín central. Kiermaier es un bateador de contacto, agresivo, que se deja cantar pocos strikes, recibe pocas bases por bolas y se poncha poco; contra lanzadores derechos batea .261 a la recta (el promedio de velocidad en la MLB es 92 millas), .283 al cambio (el promedio de velocidad en la MLB es 84 millas), .225 a la curva y .220 al slider.
En conteo de 1-1, después de lanzarle 2 lanzamientos de rompimiento a 73 millas, el lanzador cubano le tira 2 rectas consecutivas; Kevin Kiermaier falla el swing contra la primera recta a 84 millas en la esquina de afuera y le conecta línea al jardín central a la segunda recta de 85 millas al centro de home. Kevin Kiermaier es un corredor muy rápido, robó 18 bases con una efectividad de 78% el año pasado y fue el guante de oro en el jardín central con uno de los desplazamientos en los jardines más impresionantes de las últimas temporadas de la MLB.
Ante la línea al center field de Kiermaier, el jardinero central cubano se demoró para cortar la pelota, acostumbrado al corrido poco agresivo de los jugadores de la Serie Nacional; y Kiermaier, que dobló todo el tiempo, se coló en segunda.
James Loney es un bateador muy agresivo, que se deja cantar pocos strikes, recibe pocas bases por bolas y se poncha muy poco. Al primer lanzamiento le hace swing el 32% de las veces y batea para .345. Contra derechos batea .311 a la recta y .247 a la curva.
En el segundo inning con corredores en primera y segunda, después de haber otorgado una base por bolas, el primer lanzamiento del lanzador cubano es una recta al medio de 83 millas, Loney hace swing y conecta línea entre primera y segunda.
James Loney es un halador nato, al que le hacen formación del infield totalmente cargado hacia primera, con 3 inflieders jugando entre las almohadillas de 1B y 2B, incluso con lanzadores de 98 millas le regalan toda la zona de 3B; en los videos de la pretemporada de Tampa se puede ver claramente. El equipo cubano no le hizo formación especial a Loney y la línea entre primera y segunda se metió de hit al jardín derecho, impulsando una primera carrera que se pudo haber evitado.
En el cuarto inning después de 2 outs, el pitcher cubano tira 4 bolas consecutivas frente a Desmond Jennings. Viene nuevamente al bate James Loney, que contra zurdos batea .295 la recta, .209 la slider y .170 la curva. El primer lanzamiento del pitcher cubano es una recta al medio y Loney conecta jonrón de 2 carreras por el jardín derecho.
En el séptimo inning después de una base por bolas sin out, hay un cambio de pitchers por Cuba. El nuevo lanzador se enfrenta a Steve Pearce. Pearce es un bateador que tiene problemas con la zona de strike, recibe pocas bases por bolas, se poncha mucho, se deja cantar pocos strikes y tiene tendencia a hacerle swing a lanzamientos malos. Frente a bateadores derechos batea .263 la recta, .200 la curva y .170 la slider.
En 2 bolas sin strike, el pitcher cubano tira 2 rectas consecutivas. Con la primera recta, en la esquina de adentro, hace fallar el swing a Steve Pearce mientras Mikie Mahtook se robaba segunda. Con la segunda recta, al medio y un poco alta, Pearce le conecta línea de hit al jardín izquierdo que impulsa la cuarta carrera.
Más allá de la derrota el equipo cubano se vio bastante bien, aunque anotó una sola carrera conectó 9 hit y 3 extrabases, incluyendo 1 jonrón; y a pesar de los errores, utilizaron una estrategia de pitcheo inteligente y efectiva la mayor parte del tiempo, que limitó a Tampa a solo 5 hit, 2 extrabases y 1 jonrón.
Las mayores diferencias se vieron en la velocidad y el control de los pitchers, el bateo con corredores en circulación y el pensamiento técnico-táctico. Los lanzadores de Tampa dieron 7 ponches con una base por bolas y el 67% de los lanzamientos fueron strikes; los pitchers cubanos dieron 7 ponches, 5 bases por bolas y el 59% de los lanzamientos fueron strikes.
La ofensiva de los Rays impulsó a 3 corredores, 2 de ellos en posición anotadora y dejó a 6 en circulación. Los bateadores cubanos no pudieron impulsar a ningún corredor y dejaron 8 en circulación, de hecho conectaron un solo hit con corredores en bases, ninguno con corredores en posición anotadora y nunca tuvimos corredores en tercera con menos de 2 outs.
Además de las equivocaciones que tuvo por momentos nuestro pitcheo, cometimos un error en tiro a la defensa, no se atacó como debía un batazo a los jardines que se convirtió en doble, nos robaron una base en la que ni siquiera hubo tiro, hubo un wild pitch en que la pelota le quedó cerca al receptor y no pudo evitar que el corredor llegara a tercera y nos sorprendieron un corredor en base. Todos estos detalles son errores que se cometen a menudo en la Serie Nacional y que cuestan caro cuando aumenta el nivel.
Pero a pesar de todo, no hubo knockout, no hubo paliza, nadie hizo el ridículo.
Los peloteros cubanos tienen un potencial enorme, Cuba es el cuarto país con más peloteros en la MLB, detrás de USA, Dominicana y Venezuela. El primero es la súper potencia del béisbol con recursos económicos incomparables con nuestra realidad, los otros con academias de la MLB que trabajan con los jugadores desde edades muy tempranas. Los peloteros cubanos se forman en Cuba, con entrenadores cubanos, sin apoyo de la MLB, sin acceso a las últimas tecnologías, con escasez de implementos deportivos y con todos los otros problemas económicos que tiene nuestra sociedad.
¡Para todos los héroes cotidianos y anónimos del béisbol cubano, mis respetos!