Con apenas dos jornadas por disputar en la temporada regular, el panorama de la Liga Americana sigue envuelto en incertidumbre. El rompecabezas de los playoffs aún no termina de armarse, y cada lanzamiento de este fin de semana podría definir el destino de varias franquicias.
Los Marineros ya aseguraron el banderín del Oeste, y tanto Azulejos como Yankees tienen su boleto sellado a octubre. Ambos marchan igualados en la cima del Este, a la espera de quién se quede finalmente con la corona divisional. Mientras tanto, los Medias Rojas saben que su camino comenzará fuera de casa, tras haber garantizado su pase al Wild Card.
Pero aún quedan dos plazas abiertas, y tres equipos luchando a contrarreloj: Guardianes, Tigres y Astros.
Los Guardianes, dueños de su destino
Con marca de 86-74, Cleveland ha protagonizado un regreso tan inesperado como emocionante. Llegaron a estar a más de 15 juegos y medio de Detroit en julio, pero ahora comparten la cima del Centro. Su ventaja radica en los tiebreakers:
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Ganan la serie a Tigres y Astros.
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Pierden la serie con Medias Rojas.
Esto significa que con una combinación de dos resultados favorables —victorias propias o derrotas de Detroit— conquistarían el Centro. Además, solo necesitan un triunfo más o una derrota de Houston para garantizar al menos el Wild Card. Su único límite: si entran como comodín, lo harán en la sexta posición.
Los Tigres, entre la ilusión y la presión
También con 86-74, Detroit carga con el peso de haber dejado escapar una amplia ventaja en el Centro. En materia de tiebreakers:
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Pierden frente a Guardianes.
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Ganan frente a Astros.
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Serie aún abierta con Medias Rojas (3-1 a favor de Boston con dos juegos pendientes).
Esto los obliga a esperar un tropiezo de Cleveland para conquistar la división. Sin embargo, tienen control en la carrera por el Wild Card: un triunfo más o una derrota de los Astros bastaría para certificar su presencia en la postemporada. Incluso hay un escenario en el que, si vencen a Boston en los dos juegos restantes, podrían quedarse con el quinto sembrado, relegando a los Medias Rojas al sexto.
Los Astros, contra la pared
Houston, en cambio, enfrenta la situación más complicada. Con 85-75, un juego por detrás de Detroit, sus tiebreakers los condenan:
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Pierden ante Guardianes.
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Pierden ante Tigres.
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No tienen serie ganada frente a Boston.
Esto los obliga a un doble milagro: barrer a los Angelinos y esperar que Guardianes o Tigres sean barridos al mismo tiempo. De lo contrario, se rompería una racha de ocho clasificaciones consecutivas a octubre.
El telón de la temporada regular caerá en apenas 48 horas, pero antes de eso, la Liga Americana promete emociones al límite. Entre cábalas, calculadoras y desempates, la pregunta persiste: ¿quiénes sobrevivirán al vértigo del último fin de semana y se unirán al baile de octubre?

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