Al menos una fuente en Miami y otra en Pinar del Río, donde jugaba González, de 22 años, coincidieron en que el jardinero ya no se encontraba en la nómina del conjunto provincial por hallarse fuera de la isla.
Igualmente, un comentarista de la emisora Radio Guamá, Ernesto Amaya Esquivel, escribió el 29 de noviembre en su cuenta de Facebook que, «para todos los amigos que preguntan por sobre el jardinero pinareño Yasser Julio González, les informo que no va a jugar más con los Vegueros, debido a que no se encuentra en el país».
González debutó a los 18 años con Metropolitanos en el 2011 y desde el 2013 hasta hace unos días pasó a jugar con Pinar del Río siempre como guardabosque o bateador designado.
Esta Serie Nacional, la número 55, lo vio explotar a la ofensiva y hasta el momento de su fuga mostraba promedio de .296 con 10 jonrones y 34 impulsadas en 38 encuentros, además de exhibir un robusto OPS de .911.
«Este es un muchacho que estaba teniendo su temporada de hacerse hombre, como se suele decir de quien despierta y se hace sentir», expresó una fuente que sigue muy de cerca a los peloteros cubanos. «El poder es algo que escasea en Grandes Ligas, en Cuba y en todas partes. El parece tener algo de eso y pudiera ser interesante».
Al estar por debajo de los 23 años de edad y poseer menos de cinco contiendas de experiencia en la isla, González está sujeto a las regulaciones que establece el Convenio Laboral para jugadores cubanos.
Significa que aquel equipo dispuesto a firmarlo y que sobrepase el cupo de dinero asignado para firmas internacionales deberá pagar una fuerte multa que duplica el valor original del pelotero en cuestión.
González se une a un numeroso contingente de peloteros cubanos que se encuentran en otras naciones en búsqueda de la residencia para convertirse en agente libre con derecho a negociar un contrato de Grandes Ligas.
Desde el sur de la Florida hasta México y República Dominicana, por estos días se han reportado numerosas demostraciones de potenciales agentes libres cubanos, como sucedió recientemente en el estadio Quisqueya, de Santo Domingo, cuando decenas de scouts vieron a los lanzadores Norge Ruiz y Cionel Pérez.