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Ernesto Wilson Martínez, de 16 años, sueña con jugar algún día en las Grandes Ligas estadounidenses.
Ernesto Martínez y su hijo Ernesto Wilsonson cubanos. Ambos representan al equipo de béisbol de Francia que disputa una eliminatoria del Clásico Mundial de Béisbol en Panamá.
Ernesto padre, de 42 años, abandonó Cuba con un permiso de residencia en 2006 y se estableció en Francia, donde debutó como pelotero y coach en el equipo parisino Templiers Senart.
Pero no fue hasta 2015 que el receptor Ernesto logró sacar a su hijo de Cuba. El jovencito, apodado «Tico», se vio obligado a pasar tres meses en Haití antes de viajar a Francia, donde recibió la nacionalidad francesa.
El receptor Carlos Ruiz (d) del equipo de Panamá y Ernesto Wilson Martínez (i) de Francia.
Ernesto Wilson había integrado en 2014 un equipo de béisbol cubano en la categoría 14 y 15 años que viajó a Sinaloa, México, donde los cubanos se coronaron campeones y él se destacó como bateador.
En entrevista con la agencia AP, Ernesto afirmó que su hijo participó hace poco en una sesión de bateo y de lanzamientos ante los buscadores de talento de Grandes Ligas en Arizona, EEUU y que tan pronto finalice la eliminatoria en Panamá regresará a ese estado para seguir entrenando.
«Los equipos están muy interesados en él como lanzador; es zurdo, mide dos metros, pero también tiene muy buenas facultades como bateador. Tiene un instinto natural para batear y una potencia que no es normal verla en un niño de 16 años», dijo el padre, que fue receptor en Cuba.
El mánager del equipo francés Eric Gagne dijo que «el chico demuestra gran talento y es muy bueno para él y para nosotros tenerlo».
Este viernes, el equipo de Francia derrotó al de España en la eliminatoria del Clásico Mundial de Béisbol en Panamá 5 -3 y los españoles tendrán que regresar a casa, porque quedaron fuera de la competencia. Ernesto (padre) bateó de 4-2, con 3 carreras impulsadas y recibió una base por bolas.