Por David Venn
LAS VEGAS – José Altuve tuvo un 2018 poco común para su estándar, en cuanto a lesiones y rendimiento se refieren.
Pero ahora que se operó de la rodilla derecha adolorida, molestia lo afectó a lo largo de la segunda mitad de la temporada y durante los playoffs, el segunda base venezolano se encuentra en una fuerte rehabilitación física.
«Estoy emocionado porque José luce emocionado y complacido con (su progreso)», reveló el manager de los Astros, A.J. Hinch. «En estos momentos, no va a haber retrasos en torno a los entrenamientos, ni esperamos más problemas.
«Aún no termina el proceso de rehabilitación, así que el tiempo lo dirá».
Altuve terminó el 2018 con línea de bateo de .316/.386/.451 en 137 partidos. Conectó 13 jonrones y empujó 61 carreras. Son sus números más discretos desde el 2013, que fue su segunda campaña completa en las Mayores. Por supuesto, la merma en su producción se debió a los dolores en la rodilla, que fueron producto de un deslizamiento realizado en Colorado a mediados del año.
Ahora, Altuve hace una rehabilitación en Houston junto a su compañero de entrenamientos físicos de mucho tiempo, el derecho Lance McCullers Jr., quien se recupera de una cirugía Tommy John.
Con la adquisición del infielder cubano Aledmys Díaz, más la presencia de su compatriota Yuli Gurriel, Hinch ancticipa más descanso para Altuve y para el torpedero puertorriqueño Carlos Correa, quien se vio limitado en el 2018 debido a unos persistentes dolores en la espalda.
«(Díaz) va a agotar muchos turnos y va a jugar en muchos puestos del cuadro interior», afirmó Hinch. «Espero que nuestros muchachos se mantengan en salud.
«Díaz (impresiona) en cuanto a estar dispuesto a hacer lo que sea necesario», continuó el capataz. «Le dije cuando lo conseguimos que era importante para él tener esa versatilidad. Pienso que fue una gran adición a nuestro grupo».