POR JORGE EBRO
José Adolis García llegó a los Cardenales justo en la primavera pasada. El atlético jardinero de San Luis enfrenta ahora su segundo viaje al spring training sin el asombro del recién llegado, pero con la idea clara de que todavía resta camino por recorrer.
El hermano de Adonis García, quien jugara varios años para los Bravos y se alista a militar en la liga de Corea, avanzó de manera rápida en el sistema de Menores de los Cardenales, al punto de comenzar en Doble A y terminar en Triple A con una línea ofensiva combinada de .290/.340/.476, además de un OPS de .817.
Con un brazo sólido y buena rapidez en las bases, José Adolis ha conquistado elogios dentro y fuera de su organización. Pensar que pudiera llegar a San Luis en algún momento de esta temporada no sería nada descabellado.
Esta es tu segunda primavera, ¿en qué se diferencia a la primera?
«En aquella era un recién llegado y todo parecía nuevo y diferente, sin contar que llegué algo después de que había comenzado. Ahora estoy más acostumbrado a cómo son los cosas en la organización, pero la ilusión es la misma, así como el deseo de crecer y avanzar hasta que pueda llegar el momento de la llamada».
Se nota un gran ambiente en el clubhouse de San Luis.
«Excelente, estamos rodeados de figuras importantes y en mi caso estoy viendo cómo trabajan los establecidos, trato de acaparar todas las ideas que se hablan aquí. Estos días me están ayudando mucho».
Este va a ser tu segundo año, ¿notas el cambio en tu juego?
«He mejorado mucho, especialmente en el pensamiento táctico. A la hora de ejecutar las cosas en el terreno me siento mucho más cómodo. Sé que aun necesito un poco más de aprendizaje, pero creo que voy por buen camino».
¿Qué te dice tu hermano?
«Adonis está más contento que yo conmigo mismo con lo que ve en mi carrera hasta el momento. El se siente feliz de que yo esté con los Cardenales y constantemente se preocupa por lo que hago. Imagínate, siempre en su papel de hermano mayor».
¿Tienes alguna fecha en mente en que deseas subir al equipo grande?
«No, por ahora solo me preparo fuerte. No quiero dejar nada a la casualidad de mi parte, para algún día hacerle la decisión más fácil al equipo. Quiero controlar lo que está en mi poder y mantener ese compromiso conmigo de ser cada día mejor».
Fuera del terreno, en la vida, ¿cómo ha sido tu adaptación a este país?
«Todo lleva su tiempo, pero creo que ya he pasado por lo más difícil y me he ido adaptando bien a las cosas. De Cuba extraño a la familia, claro está, pero ese es el sacrificio que hacemos todos los cubanos en esta pelota para salir adelante».
Hablando de cubanos, son cuatro en los Cardenales.
«Sí, nos ayudamos mucho entre nosotros, nos deseamos la mejor de las suertes. Por ahora estamos trabajando duro y disfrutando estos momentos de primavera. Después, cada cual tomará su camino. Pase lo que pase, siempre seremos como una familia».