Por Joel García León
Enrique Rojas es una voz autorizada para hablar de béisbol, ya sea sobre Grandes Ligas, Series del Caribe, ligas profesionales latinas o cualquiera de los torneos que organice “el más grande de los deportes”, como el mismo lo calificó en el estadio Rod Carew, de Panamá, minutos después de la premiación del equipo local Toros de Herrera, ganador de la 61 edición de estas justas regionales.
Su raíz dominicana no solo la lleva en su manera de hablar, está también en el amor eterno por los Tigres de Licey, uno de los conjuntos más venerados y ganadores en la tierra del merengue. La pasión por la objetividad y el análisis más certero le valió hace más de 15 años llegar a la cadena de televisión ESPN, en la cual se le puede leer diariamente en la página digital o ver en las transmisiones y coberturas televisivas de las bolas y los strikes, junto a los narradores Ernesto Jeréz y Luis Alfredo Álvarez.
Su profunda admiración por el béisbol caribeño, en especial por Cuba, puede apreciarse a primera vista, cuando te estrecha la mano para un simple saludo después de casi un año sin verte y suelta: “dime, hermano, cómo va la cosa”. En el 2015, una conversación parecida a la sostenida este 10 de febrero generó cientos de comentarios en las redes sociales a partir de una afirmación rotunda de Enrique: “yo quiero en el béisbol el comunismo”.
Se refería entonces a la posibilidad de que los peloteros cubanos recibieran el mismo tratamiento que los dominicanos, venezolanos, mexicanos, boricuas y demás latinos en la Gran Carpa, sin necesidad de arriesgar sus vidas con una emigración ilegal y en menos de narcotraficantes, ni la prohibición posterior de entrar a la tierra donde nacieron y se hicieron peloteros.
Mucho ha llovido desde entonces, muchas pelotas se han tirado y un acuerdo entre la Major League Baseball (MLB) y la Federación Cubana de Béisbol rige desde enero del 2019 sobre este tema, tras su firma en diciembre del pasado año.
La conversación transcurrió tal cual transcribimos a continuación. Es una de las memorias de la Serie del Caribe Panamá 2019 que compartimos con los lectores para, como prefiere Enrique Rojas, entrar con argumentos a la polémica.
¿Cómo valoras esta Serie del Caribe, para algunos la más débil, para otros la más sorpresiva de los últimos años?
“La Serie del Caribe ha sido impresionante en sentido general. Desde que la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe le retiró la sede a Barquisimeto (noticia que publicamos primero en ESPN por lo que significaba salvar un evento como este), uno estaba muy pesimista en torno a la Serie.
“Y cuando se anunció a Panamá no disminuyó el pesimismo que uno tenía, porque estamos hablando de un sitio que no había montado una Serie del Caribe en seis décadas y que no es de los participantes regulares en los últimos tiempos, aunque sí estuvo en la primera etapa hasta 1960 . Yo estaba, como se dice en República Dominicana, “medio chivo”, solo pensando qué podrá pasar ahí.
“Luego al darse a conocer el formato de dos grupos y que solo los ganadores avanzarían a la final también uno extrañó las semifinales. Quizás no fue el formato, sino la calidad y lo igualado que eran los equipos, pero lo cierto es que no bajó nunca la intensidad del torneo desde el primer día. El formato se dio de una manera tal que se llegó al sábado como si fueran semifinales, pues ahí se buscaron los puestos a la final en cada juego.
“No coincido que haya sido una Serie del Caribe débil. Las estadísticas y lo cerrado de los marcadores dicen lo contrario. Sí fue sorpresiva, pero eso también tiene su explicación”.
¿Qué te pareció el desempeño de los Leñadores de Las Tunas?
“Los Leñadores eran los favoritos de la Serie, porque solo Cuba puede armar unos equipos que son casi selecciones nacionales que los otros países no pueden hacer aunque quisieran, por muchísimas razones.
“Es un gran equipo, pero no bateó lo que todos pensábamos debían batear. Ningún conjunto tampoco lo hizo. En este estadio Rod Carew no se batea. Fíjate en este dato. Panamá avanza a la final 1-0 y Cuba consigue hacerlo también ganando 3-0. Como si fuera poco, la final se define 3-1con hombre en segunda y el empate en las muñecas de Alfredo Despaigne. No pude haber sido más cerrado este asunto.
“Lo que está claro es que el nivel que están viendo no solo los Leñadores de Las Tunas, sino todos los equipos cubanos que han pasado por aquí desde el 2014, es un nivel muy parecido al que se juega allá. Por eso puede pasar que en una Serie del Caribe Cuba gane los cuatro partidos y la final, pero también puede ocurrir que solamente gane dos o también, como ahora, puede ocurrir que pierda la final en el último inning. Aquí el nivel está muy parejo, casi igual. Nadie tiene una gran ventaja sobre nadie.
“Me gustó mucho el pitcheo, el manager Civil movió bien al torpedero cuando hubo una falla defensiva y lo hizo también en la receptoría. Me gustó que los grandes se comportaran como grandes. Despaigne vino a matar aquí y lo hizo. Frederich Cepeda cuando le dieron el chance también lo hizo. Y Lázaro Blanco no pudo haber estado mejor: 12 ceros.
“Por supuesto, el béisbol es un juego donde tienen que conjugarse demasiadas cosas para que se obtenga el resultado final, pero si me preguntas por los Leñadores considero que cumplieron, pues llegaron a discutir el título”.
Hace unos años hablamos de la posibilidad que los jugadores cubanos se desempeñaran en Grandes Ligas en igualdad de condiciones al resto de los latinos. Concretado el acuerdo MLB-Federación Cubana de Béisbol, ¿qué opinión te merece y cuáles perspectivas aprecias más claras?
“Cuando ese Acuerdo se empiece a materializar y veamos las primeras firmas de los jugadores será extraordinario, especialmente porque se acaba el desangre de talentos en Cuba. Esa es la parte más importante, más allá de que el pelotero cubano va a poder jugar, va a poder regresar a su país y tener una vida tranquila igual que sus oponentes.
“Mucha gente no piensa en eso. Ahora un pelotero cubano está en desigualdad de competencia porque tiene muchas cosas personales en juego cada día que los otros tienen resuelto. Ese pelotero nuevo, cuando firme, va a hacer un pelotero sin ese trauma. Pero además, podrá regresar, representar a su país y estar en igualdad con el dominicano, venezolano, puertorriqueño y todo el mundo.
“Los beneficios del Acuerdo vamos a verlo a largo plazo. No se va a reflejar inmediatamente en la próxima Serie del Caribe, pero ya la mentalidad del jugador que no tiene que abandonar su país en busca de lo que sea, dinero, fama o topar con los mejores, será otra. El hecho de abandonar un país es lo mismo para un dominicano, un venezolano, que un cubano. Siempre llevamos el campo por dentro de nosotros. Y esa es la parte más importante del acuerdo, la parte humana, que va a acabar con ese drama humano que se ha arrastrado por muchos años”.
La afición en Cuba es muy exigente y a veces muy dura con los equipos. Dijiste que los Leñadores cumplieron, pero miles de seguidores del béisbol en la isla no lo ven así. ¿Qué les dirías desde tu experiencia como comentarista internacional?
“Está claro que no se le puede explicar a un fanático que no se consiguió el resultado cuando especialmente tienes o armaste el mejor equipo. Pero imagínate, tú me hablas de Cuba, pero qué pudiera decir yo que soy dominicano. Cada equipo de mi país que sale a jugar pelota debe ganarlo todo, porque allá los fanáticos tampoco admiten nada que no sea ganarlo todo. Y no es así.
“Lamentablemente o por suerte, estamos ante el rey de los deportes, el único que permite que un país que no estaba en la pintura de la Serie del Caribe cinco días antes del inicio como Panamá se corone campeón. Eso no se da en fútbol, baloncesto, voleibol ni boxeo. Eso solo se da en el béisbol, el más grande de todos los deportes. Así que a los fanáticos del béisbol cubano les digo: acostúmbrense a esto, ustedes son fanáticos del más grande de los deportes, el único que permite que Panamá le gane a Cuba, a República Dominicana y a Puerto Rico.
“Porque no es verdad que a Panamá la invitan de repente al mundial de fútbol y le va a ganar a Alemania, Inglaterra o Francia. Eso no ocurrirá nunca, pero en el béisbol sí ocurre. Por eso este es el mejor de los deportes.
“Con eso no estoy justificando a Las Tunas por no haber ganado, pero ellos perdieron en el último inning, en el último turno de la gran final de la Serie del Caribe con su mejor bateador en la caja de bateo, Alfredo Despaigne, enfrentando a Manny Corpas, un cerrador de Grandes Ligas que estuvo en una Serie Mundial”.
¿Te veremos por fin en Cuba este 2019 para polemizar con la prensa especializada y alguna peña deportiva?
“Eso va a ocurrir este año. Estoy averiguando el calendario del inicio de la temporada. No estoy haciendo una promesa y escribiéndola en piedra, pero yo no paso del 2019 sin estar en Cuba. En cualquier evento, ya sea cuando comiencen las firmas de jugadores con la MLB, cuando comience la serie nacional o en los play off. Pero créelo, continuaremos esta conversación en Cuba este 2019. De momento, déjalo aquí para que se abra la polémica”.
1 comentario
Muy buen artículo. Ya estoy esperando el segundo y ver a Enriquito en La Habana.