La mentalidad ganadora que pretendía o pretende construir el manager Skip Schumaker en la organización de los Marlins es por ahora una utopía. No puedes ganar en Grandes Ligas con solo pensarlo. No puedes llegar a ser un gran bateador o pitcher, aunque te lo creas en lo mas profundo. Y los “flamantes” primeros movimientos de la temporada muerta del entonces recién reclutado presidente de operaciones de los peces Peter Bendix podrían estar, si no lo son, de las peores en números de inicio de temporada de la historia.
Para nadie es un secreto que Miami necesitaba bateadores después de no pujar por el slugger cubano Jorge Soler. La respuesta de las oficinas no pudo ser más mala: Vidal Brujan y Christian Bethancourt. Entre los dos aún no habian conectado un imparable hasta hoy. A mi entender tampoco lo han hecho, aunque hay uno de manera oficial que es un error del tamaño de una casa y que el anotador del loanDepot Park quizo regalarle a Brujan en la hoja de anotaciones. No puedes aspirar a mucho si desde el comienzo del juego, estás regalando al menos seis outs de los 27, sin contar la incapacidad para impulsar carreras y dar un respiro a los lanzadores rivales.
Para colmo de males. Bendix decidió eliminar la competencia u opciones a Brujan despojándose de Jacob Amaya y Jon Berti. Por su lado Bethancourt se presentaba como una alternativa más sólida que Jacob Stallings, que dicho sea de paso está bateando para 300 con los Rockies de Colorado y solo con sus tres hits suma más que los dos receptores de Miami pues Nick Fortes liga en estos momentos de 22-2 para un anémico 091. En otra curiosidad Stallings tiene la misma cantidad de hits que victorias los Marlins. Soler exhibe también tres jonrones que hubiesen servido muchísimo a maquillar el ridículo de esta temporada.
La receptoria de los Marlins enfrenta dificultades: Fortes y Bethancourt batean solo 0.45, mientras que Jacob Stallings, ex receptor del equipo, tiene un promedio de 300 en Colorado. En apenas 10 turnos ya supera en hits (3) a los catchers de los Marlins. #homeofbeisbol
?:… pic.twitter.com/9lHAIIDqy3— Yordano Carmona (@YordiMLB) April 13, 2024
Los Marlins no parecen encontrar el rumbo. No puede acabar bien lo que mal comienza. Y uno no tiene argumentos para defender la gestión de Bendix. Hasta ahora cada negocio ha sido cambiar la vaca por la chiva mientras el equipo y los aficionados se lamen las heridas tras cada derrota. La alineación completa del equipo de la pequeña Habana ronda los.170 de promedio ofensivo.