HOUSTON, TX – En declaraciones este jueves al prestigioso website deportivo The Athletic, Brian Cashman, Gerente General de los Yankees, descargó toda su frustración en contra de la organización de Houston. El mandamás neoyorkino culpó a los Astros de la sequía que atraviesan actualmente los Mulos del Bronx, e incluso fue mucho mas allá: se autodenominó “ofendido” con los comentarios que se han generado a través de los años entorno a la situación.
“Me ofende mucho cuando comienzan a decir que no hemos estado en la Serie Mundial desde 2009, porque creo que lo hicimos de la manera correcta”, dijo. Añadiendo además que “lo único que nos detuvo fue algo ilegal y horrible”, en clara referencia al escándalo del robo de señas en el que se vieron envueltos los Astros durante la temporada 2017, año en el que terminaron coronándose.
#Yankees GM Brian Cashman dijo a The Athletic que la única razón por la que su equipo no ganó la Serie Mundial del 2017 fue debido a “algo tan ilegal y horrible” como lo que hizo #Astros
— Enrique Rojas/ESPN (@Enrique_Rojas1) March 31, 2022
Sería bueno recordarle a Cashman que antes de la temporada 2017, su equipo tenía una seguidilla de siete campañas corridas sin ganar (ni siquiera asistir) el Clásico de Otoño, que si le sumamos las ocho anteriores al anillo conseguido en 2009, prolonga la ecuación a un título en 16 años. También sería bueno recordarle que de 2018 a la fecha se han jugado cuatro torneos más, e igualmente su gestión ha sido insuficiente en el afán de coronarse reyes del béisbol.
Cualquier persona poco instruida en la materia, al leer sus declaraciones pensaría que la Serie Mundial 2017 fue a base de Astros y Yankees. Ningunear a la organización de los Dodgers, quienes por méritos propios se ganaron el derecho de pelear la corona en dicha temporada, logrando incluso más victorias que cualquier otro equipo en la ronda regular (104), no es decoroso.
Entrando de lleno en la Serie de Campeonato de Liga Americana de aquel año, los Astros efectivamente vencieron en cada uno de los cuatro partidos que se disputaron en Minute Maid Park a sus adversarios. Sin embargo, el motivo de los descalabros yankees no fue su “burlado pitcheo” cómo sugería la situación.
La ofensiva de New York pudo fabricar solo tres carreras combinadas en esos cuatro choques, promediando apenas cinco indiscutibles por partido. Las alineaciones conformadas por Joe Girardi tuvieron 36 innings para hacer daño y en cambio recibieron 33 argollas de los lanzadores locales, yéndose de 126-20 (average: 159) en ese lapso.
¿Cómo afectó el sistema creado en Houston a los bates de los mulos? Simplemente no los afectó, simplemente no fue un factor. Todo el crédito al cuerpo montícular de los Astros, sobre todo a trío de Verlander, Keuchel y Morton, quienes se combinaron para trabajar 28 entradas de apenas una carrera y 36 ponches propinados en esos cuatro enfrentamientos.
Culpar a un evento aislado ocurrido en una temporada específica, de una sequía que ya rebasa el decenio, es, cuando menos absurdo e impropio. Asumir la responsabilidad es más dignificante.
Por último y no menos importante, es necesario que el señor Cashman haga memoria y recuerde que el único conjunto Yankee capaz de conquistar una Serie Mundial en el presente siglo, contaba en sus filas con jugadores como Andy Pettitte, Alex Rodríguez, Robinson Canó, Melky Cabrera, Francisco Cervelli y Alfredo Aceves, todos vinculados al uso de esteroides. Además, regresando al año en cuestión (2017), su equipo recibió una multa de Grandes Ligas por el uso impropio de los teléfonos celulares en el clubhouse durante los juegos. Eso contrasta grandemente con su afirmación de “hicimos las cosas de la manera correcta”.
“EL 99% DE LOS FRACASOS PROVIENEN DE PERSONAS QUE TIENEN EL HÁBITO DE PONERSE EXCUSAS», decía el científico estadounidense George Washington Carver.