Lázaro Estrada acaba de sumar un nuevo lauro a su carrera tras ser seleccionado para participar en el Juego de las Estrellas de la Liga Otoñal de Arizona, prestigioso circuito que cada año, entre los meses de octubre y noviembre, agrupa a varios de los mejores prospectos de las organizaciones de la Gran Carpa.
La elección de Lázaro para el choque estelar, previsto para el venidero día 9, realmente era esperada teniendo en cuenta su buen accionar en la presente edición de la justa. Vistiendo la franela del elenco Scottsdale Scorpions acumula cuatro salidas (solo una como abridor), con balance de una victoria sin derrotas.
Lázaro Estrada y la Fall League
Ha trabajado un total de 11.2 entradas, exhibiendo en ese período un PCL de 3.86. Su control ha sido exquisito, tal como lo muestran sus cifras de ponches (19) y boletos (4), factor decisivo en su WHIP de 0.94.
Es segundo del torneo en bateadores retirados por la vía de los strikes, con solo uno menos que el líder, Michael Prosecky, un talento de los Rockies de Colorado. Oportuno es señalar que durante buena parte de la liga ha sido Estrada quien ha llevado la punta en ese indicador.
El cubano es séptimo en WHIP, resultando uno de los nombres que llaman la atención por su accionar, algo que pudiera abrirle muchas puertas de cara a un 2025 prometedor dentro de las filiales de los Azulejos de Toronto.
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Sin ir muy lejos, en el 2023 otro serpentinero antillano acaparó miradas en la liga de Arizona, Orlando Ribalta, quien menos de doce meses después logró debutar en el mejor béisbol del mundo. Enfocado en ese camino anda Estrada.
El otro hijo de la Mayor de las Antillas, Kendry Rojas, no ha logrado acercarse a esos senderos. En cuatro aperturas con la escuadra de Scottsdale firma récord adverso de 0-1, con un PCL funesto de 8.10, nueve ponches, cinco transferencias y un WHIP de 1.80.
