Por Julieta García Ríos
Desde que inició la 57ma. Serie Nacional de Béisbol el Estadio Latinoamericano ha visto animada sus gradas. Los anfitriones, guiados ahora por Víctor Mesa, debutaron con éxito de 3-1 y este lunes cayeron 12-9 ante los Piratas de Isla de la Juventud, quienes también tienen intenciones de ganar aficionados, justo desde el comienzo y en la guarida de los Leones.
Antes de que iniciaran los juegos, José Luis Rodríguez Pantoja, mentor de los Piratas, comentó a JR sobre la actual campaña: «Estamos conscientes de que una subserie ante Industriales será fuerte e impactante.
Este es el momento idóneo de presentar nuestras cartas credenciales con un buen arranque. No somos de los equipos más populares, pero con nuestro desempeño hemos ganado aficionados».
Pantoja, como pasarían a llamarle luego de que conquistara el segundo puesto en la 54ta. Serie, sabe cuánto mueve la pelota.
«Fíjate si el deporte atrapa, arraiga, moviliza, que ya pocos me dicen Jose, como antes de llegar a aquella final», dijo este hombre que le regaló a los pineros, en abril de 2015, el mejor resultado en series nacionales.
—¿Cuál es su meta en esta serie?
—Discutir la final.
—Ambiciosa…
—Sí, es grande, exigente, pero alcanzable.
—¿A qué apuesta?
—Al equipo. A la unidad como conjunto. Contamos con una buena defensa, la ofensiva es aceptable, nuestros corredores son buenos en el terreno. Nuestro punto más débil es el pitcheo. Hay talento, pero falta experiencia. Si sabemos conjugar estos factores en la dinámica de los juegos, podemos lograr la victoria.
—¿Qué estrategia tiene para perfeccionar a los lanzadores?
Hacemos énfasis en su estabilidad emocional, en el nivel de aprendizaje y ejecución a partir de la información del contrario, y en el dominio de los diferentes envíos.
«Nuestro trabajo también está encaminado a fortalecer la potencia del brazo del pitcher. Varios atletas lanzan entre las 89 y 90 millas, tal es el caso de Pedro Luis Guzmán, Luis Michel Rodríguez, Miguel Ángel Lastra, Raúl Guillarte, Yunier Gamboa y Adrián Rodríguez, quien ha progresado mucho, ya trabaja hasta siete entradas».
—¿Cuál es su método de trabajo?
—Educar. Trato de que los atletas se superen continuamente, porque ello tributa en el resultado final.
—Siempre anima a sus hombres…
—Me gusta mi trabajo. Aprendí desde que empecé que es mejor estar contento, y me satisface reconocer los avances de los muchachos, por mínimos que sean.