Por JORGE EBRO
La potencia aún está media máquina. Yoenis Céspedes ha perdido 37 juego de la temporada debido a lesiones en las piernas y el efecto no se ha sentido en los Mets como la explosión de una bomba de profundidad.
Nueva York se apresta a cambios sustanciales, pero el cubano debe ser una de las constantes para el resto de la temporada y el futuro. Ahora, sin embargo, la situación del equipo de Queens resulta lamentable.
Tan concentrado está en completar su recuperación que ni de reojo mira al Derby de Jonrones, competencia que ganó dos veces, a la cual no volverá ni aunque se lo supliquen sus seres más queridos.
Céspedes siente que su momento se acerca, que su cuerpo envía señales de plenitud y fortaleza. Cuando La Potencia carbure a toda máquina los Mets podrán mirar a la vida de una manera diferente.
¿Cómo evalúas el estado actual de tu salud?
«No me siento al ciento por ciento, pero sí mucho mejor de cuando regresé de la lesión. Estas son cosas que debemos pasar todos los deportistas. Debemos aprender a jugar con dolor. Es algo que se presenta en el camino de la vida y hay que saber luchar contra eso».
¿Te frustró mucho estar tanto tiempo fuera de juego?
«En mi caso es al revés. No es tanto concentrarme en la frustración sino en el deseo de regresar, de volver a ayudar al equipo. Si pienso en eso, entonces encuentro la fuerza para rehabilitarme y seguir adelante».
¿Miras a la segunda mitad de la temporada con mayor optimismo?
«A pesar de las lesiones, estoy contento con los números que voy teniendo hasta ahora. Solamente he participado en 32 juegos. No estoy satisfecho porque sé que lo puedo hacer mejor, pero estoy contento. Después del Juego de las Estrellas espero estar a toda máquina».
Se habla de cambios en los Mets, ¿cómo ves el equipo?
«El equipo está pasando por una situación, diría yo que crítica, difícil. Creo yo que sí van a haber cambios en las próximas semanas. Yo entendí cuando me cambiaron de Oakland para Boston que el béisbol es un negocio. Hoy puedes estar aquí, pero mañana no sabes donde estarás»
¿Te ha picado el deseo de volver al Derby de Jonrones, aquí en Miami?
«No, para mí es un capítulo cerrado. Se lo digo a mi familia y a muchos fanáticos que me lo piden. Ya mi tiempo pasó. Lo que iba a hacer, ya lo hice. Ahora que vengan otros y hagan lo que les toca».
Tu hermano ya es figura del equipo nacional cubano, ¿qué sientes al verlo jugar?
«Lo he visto jugar algo, sobre todo en el Clásico. Te puedo decir que me siento orgulloso de ver a mi hermano que va por buen camino».
