Para alegría de los Astros de Houston, el primera base cubano José Abreu parece estar mostrando síntomas de recuperación. Luego de un inicio de temporada discreto en cuanto a ofensiva, el toletero cubano va dando muestras de su elevado poder de bateo y en lo que va de mes ha remolcado 14 carreras.
En el partido de este miércoles ante los Nacionales de Washington, Abreu se fue 4-2, con dos carreras anotadas y tres carreras impulsadas de las cinco anotaciones que fabricaron los Astros para llevarse la victoria. Además, el antillano disparó su primer cuadrangular jugando como local y acumula ya 4 jonrones en la temporada.
Luego de concluido el partido en el Minute Maid Park, el toletero cubano ofreció declaraciones exclusivas a Pelota Cubana sobre el trabajo que ha venido realizando para recuperar su ofensiva característica y ayudar al equipo ante la ausencia de su compatriota Yordan Álvarez.
“Seguimos en la misma línea, al final el trabajo continuo conlleva a que salgan las cosas bien. No soy de las personas que creen mucho en los resultados, si tu te enfocas en hacer las cosas correctas antes del juego tarde o temprano el resultado va a estar”, comentó el cubano.
“Estoy agradecido con la vida por darme la oportunidad de tener salud que es lo más importante en este juego. Además, los compañeros han estado desde el principio apoyándome y eso vale mucho para mí. Estar positivo y creer en el proceso es lo más importante. Creo mucho en mi y en lo que puedo hacer, no me enfoco mucho en lo que dicen las personas que supuestamente son de bien y para mi no lo son tanto”, agregó.
En referencia a la baja por lesión de Yordan, Abreu dijo que todos en el equipo lamentan que no este saludable ahora. “Es parte del proceso de este juego, pero buscamos la manera de transmitirle confianza para que este positivo en el proceso de recuperación y es lo más importante para el equipo. Gracias a Dusty por confiar en mí, y siempre está buscando la manera de que uno haga las cosas bien”
Recientemente el slugger cubano arribó a la cifra de 1500 hits en Grandes Ligas, y se convirtió en el segundo jugador cubano en lograrlo luego de haber participado en las Series Nacionales