El cubano Jorge Soler está demostrando su increíble capacidad de bateo y los Bravos de Atlanta comienzan a ver los resultados de los millones que invirtieron para llevarlo nuevamente al equipo.
En el enfrentamiento ante los Rockies, Soler mostró su poder ofensivo y bateó de 5-2 con dos impulsadas y una anotada.
En el quinto episodio, el Crudo conectó su primer hit del partido y luego en el séptimo disparó un enorme cuadrangular para empatar el marcador.
Con el marcador 5-3 favorable a los Rockies, Soler conectó una slider de 84.5 MPH en la zona baja del cuadro y mandó la pelota por todo el jardín central, hasta los 397 pies a una velocidad de 102 MPH.
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Este fue el primer jonrón de Soler desde que lo adquirieron de San Francisco y su décimo tercer jonrón de la campaña y llegó a 43 carreras remolcadas, 60 anotadas, 88 hits y 38 extrabases, para un .238 de promedio de bateo.
Los Bravos no han podido mantener una racha ganadora y han cedido en seis encuentros seguidos, para quedar fuera de los puestos de comodín de la Nacional tras liderar la carrera por los comodines casi toda la campaña.
A pesar de las dificultades recientes del equipo, la actuación de Soler podría ser un indicio de que está recuperando su forma. Su habilidad para llegar a base y convertir dobles podría ser crucial a medida que la temporada avanza y los Bravos buscan asegurar su lugar en los playoffs.
Su regreso a un rendimiento óptimo podría ser un factor determinante para las aspiraciones de los Bravos de Atlanta en esta temporada. La capacidad de Soler para hacer contacto sólido con la pelota y su fuerza en el bate no solo lo convierten en una amenaza en el plato, sino que también puede inspirar a sus compañeros de equipo a elevar su nivel de juego.
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Con un lineup repleto de talento, la ofensiva de los bateadores de Atlanta y un picheo de calidad podría ayudar a revertir la tendencia negativa que ha tenido el equipo.