Por Yirsandy Rodríguez, Senior Writer en BaseballdeCuba – Especial para Inside
Lourdes Gurriel Jr. jamás olvidará la noche del 20 de abril de 2018, donde se convirtió en el cubano No. 201 que logra la soñada meta de jugar en MLB.
Su visita al Yankee Stadium, significó el inicio de lo que podría ser parte de una gran historia en el béisbol de las Grandes Ligas.
Mucho antes de escuchar el anuncio de su nombre por la amplificación local, para enfrentarse contra el lanzador derecho de los Yankees de New York, Sonny Gray, Gurriel Jr. ya estaba respirando el sentir de un día histórico en su vida.
Desde que llegó al clubhouse y supo que estaría en el lineup de los Blue Jays para el juego en la noche del viernes, sus emociones fueron incontrolables. El momento se veía venir desde el Spring Training, ya que la organización había centrado su mirada en el desempeño del cubano dentro de las Ligas Menores, donde golpeó un sólido .347/.382/.510 y .405 wOBA en 55 PAs este año.
Disfrutando sin igual, Gurriel Jr. twitteó para expresarle el sentir y agradecimiento a todos sus seguidores:
Lourdes Jr. estaba viviendo el sueño que no pudo alcanzar su padre, el mismo por el cual su hermano mediano, Yuli Gurriel, pasó una larga espera, hasta que debutó a los 32 años con los Astros de Houston en agosto de 2016. Sin dudas, para toda la familia Gurriel Castillo, fue un día especial.
Como era de esperar, había una gran expectativa por ver el debut del cubano de 23 años, su desempeño al bate y la energía alrededor de la segunda almohadilla, donde iba a conformar un combo junto a su compatriota Aledmys Díaz.
Por supuesto que la presión estuvo presente, algo normal cuando los jugadores novatos se enfrentan a su primera prueba de fuego, pero Lourdes Gurriel Jr. se vio paciente, su swing fue fluido y, en apenas dos apariciones contra los Yankees, despertó un interesante foco de atención:
Después de fallar en el tercer inning con una línea fuerte al centerfield, disparo que salió de su bate a 100.3 mph y recorrió 327 ft, golpeó su primer sencillo de Grandes Ligas en la parte alta de la cuarta entrada. Fue un rodado por el centro del campo contra Gray, para así impulsar la carrera que puso delante por 5-4 a los Blue Jays.
¡Yeah!, el 1-for-2 se veía bien, con dos golpes salidos a más de 100 mph, 100.3 y 106.4, ambos localizados en un punto bajo (dentro y fuera) de la zona de strike. Sin embargo, Gurriel Jr. firmó una noche mágica de novato cuando entró a la caja de bateo con las bases llenas en el quinto inning. Ahí fue recibido por el relevista Domingo Germán, a quien superó conectando un sencillo al right field en la cuenta de 1-1. ¡Los Blue Jays se fueron delante por 6-5!
Luego de que Miguel Andújar pulverizó con un homerun la ventaja de 5-4 que impuso Gurriel, el empate 5-5 permaneció por apenas ocho bateadores en el lineup de Toronto. Junto a Gurriel Jr., sus compatriotas Kendrys Morales y Aledmys Díaz también ayudaron en el rally del quinto episodio, totalmente decisivo para el resto del partido.
Cuando Aaron Judge se ponchó con una fastball de humo (95.6 mph) del cerrador Roberto Osuna, los Blue Jays (13-6) habían ganado un juego de béisbol 8-5 sobre los Yankees y, con solo dos hits de un novato llamado Lourdes Gurriel Jr., la decisión habría sido suficiente a mitad del desafío.
Sin dudas, el primer show de Gurriel Jr. fue sensacional, mostrando apenas un adelanto de lo que puede traer su cliché a largo plazo.
Fue una emotiva noche de béisbol donde los Blue Jays están demostrando lo difícil y duradera que será la batalla por el banderín de la División Este en la Liga Americana.
¿Cuántas muestras más veremos de Lourdes Gurriel Jr.?… Solo él podrá inundar nuestras pupilas a base de ese talento y la energía que despliega dentro del diamante.
Por ahora, a vivir el momento: ¡Bienvenido a las Mayores el cubano No. 201!