Si preguntamos en los aficionados quién fue el cubano que más jonrones despachó en 2023 en Ligas Menores pocos darían la respuesta correcta, quizás Pedro León o Yanquiel Fernández serían los nombres más repetidos. Pero aunque ambos sobrepasaron la veintena de vuelacercas, otro jugador, menos mediático pero con una tradición deportiva familiar relevante, fue el puntero en este sentido. Su nombre es Félix Stevens Cañizares, funge como inicialista y jardinero en las sucursales de los Cachorros de Chicago.
Este muchacho nació en La Habana, en 1999. Su padre, también llamado Félix Stevens, fue un destacado corredor de las selecciones cubanas de atletismo. Su tío también fue deportista, defendió los colores de los Industriales e incluso llegó a jugar en MLB, Bárbaro Cañizares. Precisamente Cañizares ha sido su inspiración desde niño, por él fue que se inició en el béisbol. Desde 2019 juega en las Menores y ha ido escalando poco a poco teniendo, por mucho, su mejor desempeño en el recién concluido 2023.
Actuó en dos niveles (Clase A y A Avanzada) y en 119 juegos de forma global acumuló average de 263 (418-110), con 66 anotadas, 28 dobles, un triple, 27 jonrones, 72 empujadas, ocho bases robadas en 11 intentos, 345 de OBP, 529 de slugging y 874 de OPS. Algo a mejorar para el futuro cercano es su marcado desequilibrio entre boletos (46) y ponches (151).
Este invierno ha jugado en la liga de Puerto Rico, donde sus números no son favorables pero ha sumado lo más importante, experiencia sobre el terreno y juego diario, factores imprescindibles en el desarrollo de un talento indiscutible del béisbol cubano. Resulta arriesgado vaticinar desde ahora en qué momento pudiera ascender a las Mayores. El próximo reto debe ser superar el tránsito por Doble A, circuito que muchas veces marca un ante y un después en las carreras de los prospectos.