Autor: Jorge Luis Merencio Cautí
Guantánamo.-El balance de 12 victorias e igual cantidad de derrotas exhibido por el equipo de esta provincia en la 58 Serie Nacional de Béisbol (sin incluir los resultados de ayer), no deja de sorprender favorablemente a especialistas y aficionados.
Dicho resultado ubica a Los Indios guerreros a solo dos triunfos de los conseguidos en toda la campaña anterior (restan 21 partidos), en la que se ubicaron en el penúltimo puesto (15), solo por delante de Cienfuegos, con un desempeño que dejó mucho que desear en todas las áreas de juego.
Hasta el momento, el palmarés se corresponde con el compromiso contraído por el conjunto, ante sus aficionados, de revertir la actuación precedente y pelear por la clasificación para la segunda fase.
La ofensiva y la defensa presentan un resultado discreto, con 273 y 974 de average, respectivamente, correspondiendo al pitcheo mostrar la mejor cara, al ubicarse en el segundo lugar entre los 16 equipos, únicamente por debajo de Villa Clara.
Los lanzadores guantanameros permiten, como promedio, 3.68 carreras limpias por juego de nueve entradas, resultado afianzado mayormente en la mejora de su control y repertorio. Granma dialogó con Libán Pouymiró Sánchez, entrenador
de pitcheo de Los Indios guerreros, en busca de los elementos que sustentan el ascenso de su staff.
La base de entrenamiento realizada en Playa Maguana por 15 días, con trabajo en la arena para mejorar la preparación física y fortalecer especialmente las piernas y los brazos, fue el primer elemento expuesto por el especialista, quien ponderó la instrucción teórica sobre los fundamentos del pitcheo, realizada mediante videos, talleres, conferencias y estudio de literatura sobre el tema. El hecho de haber efectuado 37 desafíos de confrontación, 17 de ellos con equipos de otras provincias, aportó confianza y práctica a los serpentineros, puntualizó Pouymiró Sánchez.
–¿Cómo trabajaron el control?
–Lo hacemos con la repetición de lanzamientos desde el montículo. Cada día los serpentineros realizaron entre 50 y 60 pitcheos. Lo otro fue el empleo de la llamada diana, un aditamento que se coloca delante del home y que se puede mover a conveniencia, el cual posibilita aprender a trabajar en las esquinas. Además, se laboró en la mecánica de los movimientos y en mejorar el repertorio con el
incremento de la sinker, el split finger y, en algunos casos, el cambio de velocidad.
«El retorno de Dayron Alexis Riera y un segundo aire de Frank Navarro han ayudado mucho al equipo.
«Tanto han contribuido que entre ambos suman seis victorias. Junto a Pedro Agüero, ellos conforman el trío de nuestros principales abridores. Creo que Riera tiene la calidad necesaria para asumir empeños mayores. Domina al menos cuatro lanzamientos, demuestra capacidad de trabajo, valentía y determinación en el montículo y, al igual que los demás, está muy motivado.
«Navarro realizó una excelente preparación física y mejoró su mecánica. Era un lanzador esencialmente lateral y lo convencimos para que tirara por encima del hombro, lo que le ha permitido ganar en control y velocidad, tanto que con su recta ahora alcanza las 90 millas. Todo ello le ha hecho recuperar la confianza».
–¿Se dirige el pitcheo desde el banco?
–Qué lanzamiento tirar lo deciden entre pitcher y receptor. Es un asunto de la batería. Solo se dirige el pitcheo desde el banco en situaciones bien complicadas y cuando actúa un relevista de poca experiencia y bajo nivel de resolución.
–¿Principales prospectos?
–Jorge Ángel Sánchez, Reider Moreira, Orlandis Martínez, Yeudi Reyes y Julio César Preval, entre otros. Todos tienen buena velocidad, deseos de lanzar y trabajan por mejorar su repertorio.