Con la capacidad de cambiar la decoración de un partido de béisbol, el jonrón ,sin dudas, es el batazo más espectacular del juego. El graderío se enardece, los dogouts estallan de júbilo, los comentaristas los adornan con frases llenas de adjetivos y a los bateadores que son capaces de producir cuadrangulares en grandes cantidades les esperan los mejores contratos.
Los equipos Cuba en los eventos internacionales siempre se han caracterizado por contar en sus filas con peloteros que con un swing pueden llevar la bola más allá de los límites del estadio. Sin embargo, en los últimos cuatro años el jonrón ha sido una conexión de mucha rareza para los equipos de La Mayor de Las Antillas. A tal punto que parece que se encuentra prácticamente en extinción.
Para ejemplicar lo antes expuestos tomaremos como muestra un trabajo del estadístico Yasser Vázquez del proyecto, Team Vívela. Allí se analiza el periodo de tiempo comprendido desde el año 2019 con la Serie del Caribe de Panamá hasta el recién concluido V Clásico Mundial de Béisbol en este 2023.
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En la compilación de Vázquez, aparece en el año 2019 tres eventos para la selección cubana de béisbol, La Serie del Caribe en Panamá, los Juegos Panamericanos de Lima y el Premier 12. En esos tres eventos solamente base conectaron dos jonrones por los bateadores cubanos. Se resumen de esta manera, en la Serie del Caribe no se pegó jonrón en 164 veces al bate, cayeron dos pelotas más allá de las cercas en los Panamericanos en 145 turnos legales y tampoco se pudo pegar de jonrón en el Premier 12 con 98 visitas oficiales al plato.
Para dejar un total de solo dos vuelacercas en 407 veces al bate y una frecuencia de un jonrón cada 203.5 turnos oficiales solamente ese año.
El 2020 se fue sin competencias internacionales debido a la Pandemia de Covid-19 por lo que los eventos de este tipo tuvieron que esperar hasta el 2021. Ya en ese año, el equipo Cuba participó en el Preolímpico de Las Américas desarrollado en la Florida, Estados Unidos. En ese torneo los bateadores antillanos dispararon cuatro jonrones (la mayor cantidad del período a estudiar en este análisis) en un total de 112 veces al bate.
Un año después en el 2022 un equipo con las Cuatro Letras estuvo presente en la tradicional Semana Beisbolera de Harlem, en los Países Bajos. Allí en 150 turnos oficiales no se pegó ningún batazo de vuelta completa.
En este 2023 ya el mundo se va tornando más a lo que conocimos de él antes de la Pandemia y aunque estamos en el tercer mes del año ha han habido dos torneos internacionales de envergadura donde Cuba ha estado presente, La Serie del Caribe de Gran Caracas, Venezuela y el V Clásico Mundial de Béisbol.
En la fiesta beisbolera caribeña los bateadores de Agricultores (equipo que representó a Cuba) pegaron un vuelacercas en 236 veces al bate.
Mientras que, en el recientemente concluido (con un cuatro lugar como segunda mejor actuación histórica para Cuba) Clásico Mundial solo dos pelotas se fueron del estadio conectadas por el «Team Asere» en 206 veces al bate.
Estos datos dan un sonrrojante total de nueve jonrones en mil 111 (1.111) veces al bate. Dejando una frecuencia de un cuadrangular cada 123.4 turnos legales. Incluso a ese dato hay que añadir que de esos nueve batazos que se llamaron las cercas hay tres que fueron en juegos que terminaron con derrota para Cuba.
Esto explica en parte, por qué en estos eventos la selección cubana ha dejado sobre el 80% de los corredores en bases.
Además, de que en ese lapso no han llegado victorias para La Mayor de Las Antillas, lapso de tiempo que se extiende para el equipo grande desde la Serie del Caribe de San Juan, Puerto Rico en el 2015.
Por supuesto que hay muchos factores para que esto ocurra. Uno de ellos es la salida de los principales slugger’s al béisbol profesional, sobre todo a la MLB. Pero, siempre es llamativo como se va cediendo terreno también en este aspecto y lo necesitado que está el béisbol cubano de bateadores de poder tanto dentro del béisbol que se practica en La Isla y que esto se pueda replicar con el uniforme del Cuba. Hasta este memento, solo se puede apreciar que el jonrón para la selección nacional está en peligro de extinción.