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Por Yusseff Díaz
El futuro de nuestro equipó nacional en los jardines se ve muy brillante. Para el futuro tenemos 3 jardineros de 5 herramientas para ocupar las tres posiciones en los jardines. Entre Victor Victor Mesa, Yoelkis Céspedes, y Luis Robert Moirán el cielo es el límite en talento y potencial que posean estos tres jóvenes.
Moirán es el prospecto más cotizado en la isla hoy en día. Sus números en la primera etapa de nuestro torneo esta temporada lo tienen en el camino para hacer el jugador mas valioso de nuestra serie. Esta primera etapa bateó .392 con 10 jonrones, 2 triples, 34 carreras impulsadas, y líneas ofensivas de.522/1.193. Sus 10 dobles y slugging de .671 lideraron la liga en la primera etapa.
Céspedes quien es el hermano de Yoenis “La Potencia ” Céspedes es un prospecto muy interesante. Varias gente cerca al béisbol cubano me han dicho que el Céspedes menor es mejor pelotero que su hermano mayor a esa misma edad. Los números del menor en la primera etapa fueron excelente, el joven bateó .304 con 5 vuelacercas, 8 dobles, 25 carreras empujadas, y tuvo líneas ofensivas de .362/.525/.887. El gramense tiene las condiciones para ser un gran pelotero en cualquier liga de mundo. Los 6 triples del toletero lideraron el circuito antillano en la primera etapa.
Mesa es un jardinero central puro. El hijo de Víctor Mesa se anunció como una futura estrella en la primer etapa y demostró que es un pelotero completo. Se sabía que Mesa es un buen jardinero debido al guante de oro que gano en la Serie 55 pero esta temporada tuvo un explosión con su bate , bateando .331 con 4 cuadrangulares, 7 dobles, 4 triples, 30 carreras remolcadas, y líneas ofensivas de .383/ .517/.900. Lo que lo separa de los otros dos es velocidad que el trae en las bases, esto nos enseña otra dimensión que posea el matancero. Aunque los otros dos tienen velocidad en las bases no son el robador de bass que es el Mesa joven. La 22 bases robadas del yumurino en la primera etapa fueron la suma más grande en la primera etapa.
Mirando los números y juzgando por la madurez que le hace falta a estos tres todavía creo que tenemos un futuro brillante en nuestros jardines.