Esta vez el zurdo matancero no pudo sostenerse como en sus anteriores presentaciones, en las cuales había logrado caminar tal cual se le exige a los abridores. Sin embargo, ahora Yera fue castigado con par de inatrapables, uno de ellos doble impulsor de dos carreras, los cuales se combinaron con dos boletos e igual cantidad de robos de base.

El receptor Yosvani Alarcón sufrió la velocidad de los Jackals, conjunto que se ha robado 46 bases en 57 intentos, prueba de la efectividad en este importante apartado, con muy poco desarrollo en nuestro país.

Lázaro Blanco relevó a Yera, y aunque permitió una carrera en el segundo capítulo, logró liquidar cuatro entradas y dos tercios a ritmo de siete ponches, detalle que permitió a Cuba soñar con la victoria en el capítulo de despedida de la Can-Am.

Sin embargo, la artillería caribeña solo produjo tres carreras al cierre del primer tercio, con boleto a Julio Pablo Martínez, sencillo de Yorbis Borroto, doble de Luis Robert Moirán que empujó una, y posterior sencillo de Jefferson Delgado con dos outs que remolcó las otras anotaciones de la tropa de Roger Machado.

Luis Robert tuvo un gran partido con tres inatrapables, dos de ellos dobles, pero la tanda baja no tuvo una jornada feliz, pues no logró conectar ningún jit ante los cinco lanzadores que utilizaron los Jackals.

Además de Yera y Blanco, por Cuba trabajaron desde la lomita Liván Moinelo y Miguel Lahera, quienes en tres capítulos no toleraron carreras, con cuatro ponches, demostrando por enésima salida que han sido lo mejor del pitcheo antillano en el circuito norteño.