Por Yusseff Díaz
En estos días he leído varias predicciones sobre el joven Víctor Víctor Mesa que en mi modesta opinión no son realistas.
He leído varios blogs y hasta varios artículos de periodistas respetados que han dicho que el guardabosques antillano podría ser un candidato para ganar el premio al Novato del Año en el 2019.
A esa gente les digo, miren más pelota. Le estamos exigiendo mucho a un joven que nunca ha jugado en las Menores y que todavía se está desarrollando.
Vamos a poner los pies en la tierra, mi gente. Pongámoslo en A+ o AA para relanzar su carrera… ¿por qué necesitamos tirar Mesa a los lobos desde el comienzo? Miami está en reconstrucción, no hay prisa para ganar ahora. Si Lewis Brinson quien es un pelotero más maduro que Mesa, tuvo su dificultades en las Mayores, ¿qué creen que le pasaría a Mesa?
Su defensa y su brazo están al nivel de Grandes Ligas, pero su bateo no.
Vamos a darle tiempo para que desarrolle su bateo, no necesitamos dañarle la confianza al joven, porque eso es lo que puede pasar si lo subimos a la Gran Carpa sin estar listo.
Si jardineros más maduros como Luis Robert y Julio Pablo Martínez están pasando por las granjas, ¿por qué hay periodistas haciendo estas predicciones que están al borde de la locura?
Mi gente, no estamos hablando de Yoenis Céspedes, un jardinero maduro y que uno sabía que estaba listo para el mayor nivel. Estamos hablando de Víctor Víctor Mesa, un gran prospecto y el #1 de los Peces.
Sí, lo digo sin esconderlo, este servidor es un fanático de Miami, porque es la ciudad donde mi crie y ojalá que Víctor lidere a Miami a un campeonato algún día, pero ahora no es el tiempo.
Dejen que Víctor Víctor Mesa se desarrolle y deberíamos dejar que el muchacho pase por las granjas para que tenga el mejor desempeño posible cuando llegue al parque en la Pequeña Habana.
¡Aquí no hay apuro, Miami no puede ganar ahora! Tampoco necesitamos arriesgar el futuro del premio de la agencia libre internacional subiéndolo cuando no está listo.