En un mundillo tan espinoso como el de la pelota nacional, con Carlos Martí sucede lo mismo que con Luis Giraldo Casanova o Javier Méndez: todo el mundo te habla bien de él. Yo mismo no puedo dar queja: hace un tiempo, sin siquiera conocerme en persona, me dio declaraciones vía telefónica con amabilidad pasmosa; y unos días atrás, en la subserie ante Matanzas, encontró tiempo para mí en el intermedio de una doble jornada.
Apellido ilustre, notable director. El hombre lleva varias décadas en los trajines del dugout, comandando sobre todo a ese Granma que nunca ha podido coronarse aunque más de una vez ha presentado candidaturas de respeto. Como ahora, cuando ya casi aseguró su arribo a las semifinales de la Serie.
De eso quiero que hablemos. ¿Puede Granma dar una sorpresa en esta campaña?
-Siempre salimos con la mentalidad de pelear y coger el mejor lugar. Hubo una época en que llegamos varias veces a los play offs y teníamos opciones, pero estaba en su apogeo la famosa Aplanadora santiaguera y no pudimos derrotarla. De momento lo más grande que hemos conseguido ha sido un tercer puesto. Quizás este año podamos superar eso.
¿Sientes que tu equipo está entre los favoritos?
-No. Creo que los dos equipos más completos son Matanzas y Ciego de Ávila, aunque en un play off cualquier cosa puede pasar.
¿Qué necesitas de manera especial para fortalecerte de cara a la postemporada?
-Sobre todo un torpedero. No lo solicitamos en la primera vuelta porque necesitábamos fortalecer a fondo el pitcheo.
Valórame el desempeño de Granma en esta Serie…
-Nuestro pitcheo ha estado bien, la defensa ha mejorado, pero la ofensiva se ha mostrado inestable. Hemos tenido la desgracia de que Roel Santos no intervino en buena parte del campeonato y Alfredo Despaigne apenas nos ha jugado. Con ellos dos desde el principio posiblemente estaríamos en una mejor posición.
¿Jugará Despaigne la postemporada?
-Él planteó que si clasificábamos para los play off, estaría con el equipo.
¿Se parece la pelota cubana de hoy a la que usted vivió en décadas pasadas?
-La pelota cubana ha disminuido más de un 60 por ciento. Hay que buscar soluciones urgentes, porque esto mismo que estamos haciendo ahora de jugar al sol con cuatro personas en las gradas, es agotador por un lado y desestimulante por el otro. Los atletas son los que sufren estas cosas.
¿Antes era más fácil dirigir?
-Por supuesto. Ahora es más complicado. A menor calidad, más problemas para lograr los objetivos.